Venezuela entró a una semana crucial para la elección, el próximo domingo, de una polémica asamblea que reformará la Constitución y que la oposición rechaza por considerar que perpetuará al gobierno de Nicolás Maduro en el poder.
En el último intento por frenar la elección de los 545 miembros de la Asamblea Constituyente, los opositores de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocaron a una huelga de 48 horas entre el miércoles y el jueves -tras un paro de 24 horas de la semana pasada-, y a una gran marcha en Caracas el viernes.
Las principales centrales de trabajadores respaldaron el llamado. “Va más allá de reivindicaciones laborales (...). Es una huelga histórica que busca detener la tiranía”, aseguró este domingo la dirigente sindical Marcela Máspero.
El presidente Nicolás Maduro enfrenta también una creciente presión internacional, con amenazas de sanciones económicas del presidente estadounidense, Donald Trump, y llamados de gobiernos de Latinoamérica y Europa para que desista de la Constituyente.