El mercado andino de oleaginosas quedará abierto a la competencia regional de países productores a partir del próximo año y su anuncio preocupa a los exportadores y productores del grano, debido a las consecuencias que podría traer para el sector.
Las ventas anualmente están en alrededor de $us 1.000 millones, pero ahora el Tratado de Libre Comercio suscrito por Perú y Colombia con Estados Unidos es un hecho consumado y el sector soyero está preocupado.
A eso se suma el Acuerdo de Complementación Económica 59 suscrito por dos países andinos con el Mercado Común del Sur (Mercosur) que también alienta el desmantelamiento de aranceles para el comercio de oleaginosas.
“Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, por una parte, y Colombia y Ecuador, por otra, han firmado el ACE-59, que elimina tarifas de los países signatarios”, precisó el investigador de la Fundación Milenio, Gonzalo Flores.
Empero, el ministro de Producción y Economía Plural, Eugenio Rojas, ratificó recientemente la negativa del Gobierno a liberar las exportaciones de soya.