La Declaración de Lima, suscrita el pasado martes por 12 países americanos, ahonda el aislamiento de Venezuela en la región pero muestra flecos sueltos en la estrategia, como la inexplicada ausencia de Estados Unidos y el apoyo de solo 12 de los 17 representantes internacionales reunidos en la capital peruana.
Este grupo de naciones -entre ellas México, Brasil, Argentina o Colombia- se dio cita en Lima, como reconoció el anfitrión, ante la imposibilidad de aprobar un texto contundente en la Organización de los Estados Americanos (OEA), donde se necesitan 18 votos para las decisiones por mayoría simple y 24 para las de dos tercios.