Sao Paulo.- La policía allanó ayer la residencia y las oficinas del gobernador del estado brasileño de Río Grande de Norte, Robinson Faria, sospechoso de haber incurrido en los supuestos delitos de asociación ilícita y obstrucción a la justicia.
Según un comunicado de la Policía Federal, Farias habría llevado a cabo maniobras ilegales para “encubrir” una serie de investigaciones contra el Ejecutivo del Estado, relativas al desvío de recursos públicos mediante la supuesta inclusión de funcionarios “fantasmas” en la Asamblea Legislativa desde 2006.
Cerca de 70 policías salieron a las calles del estado, situado en el nordeste del país, para hacer cumplir dos mandatos de prisión y nueve órdenes de registro.
Las órdenes judiciales fueron expedidas por el Superior Tribunal de Justicia, ya que, por su condición de gobernador, Farias cuenta con el amparo de ese fuero especial.
Además, los agentes allanaron la mañana de ayer el apartamento de Farias, las oficinas del gobernador y la Asamblea Legislativa, y detuvieron a dos asistentes de confianza del político.
En los últimos años decenas de políticos son investigados en todo Brasil por diversos casos de corrupción, especialmente en torno al escándalo que ha salpicado a la petrolera Petrobras y otras importantes empresas estatales del país. (EFE)
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