Ayer, al promediar las 21.00 horas, el sector no vidente y la Caja Nacional de Salud (CNS) firmaron un acuerdo en el que se establece la instalación de mesas de diálogo, es por ello que se declaró un cuarto intermedio por el plazo de 90 días.
El gerente general de la Caja Nacional de Salud (CNS), Juan Carlos Meneses, explicó que a través de la conformación de mesas de diálogo en las que participarán la Defensoría del Pueblo, la Federación Nacional de Ciegos de Bolivia (Fenaciebo), el Instituto Nacional de la Ceguera y el directorio de la Caja Nacional de Salud (CNS) analizarán formas de solución al conflicto.
Asimismo, informó que el acuerdo firmado tiene como plazo 90 días para realizar un análisis técnico y legal considerando que hay una disposición legal que permite brindar atención de salud solo a las personas invidentes y no así a sus familiares.
A su vez, la delegada defensorial de la ciudad de La Paz, Teresa Subieta, manifestó que como veedora fue testigo del acuerdo y consenso entre ambas partes.
El representante del Consejo Nacional de la Ceguera, Edwin Díaz, afirmó que pese al acuerdo de la instalación de mesas de diálogo y negociación con las autoridades, el sector no rechazará la “conquista social” que los no videntes ganaron desde el año 1991 que es la afiliación del grupo familiar de los invidentes.
Díaz manifestó que según los días establecidos en el acuerdo las medidas de presión de huelga de hambre y continuas movilizaciones de sus compañeros cesarán durante ese tiempo.
A razón de ello, el sector declaró una solución parcial, dando un cuarto intermedio entre las personas ciegas y la Caja Nacional de Salud (CNS), con el compromiso de entablar un diálogo con prontos resultados.
El sector en conflicto accedió a la revisión técnica a efectos de lograr por la vía legal la posibilidad de incorporar a su grupo familiar al seguro social de corto plazo.
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