La violencia familiar, en especial contra la mujer, es un hecho cotidiano en nuestro país, y aparentemente es considerado algo natural. Es un problema muy poco atendido, por insensibilidad de la sociedad y por no ver sus consecuencias en su verdadera dimensión. Pero estas agresiones deberían ser analizadas como ameritan, para ponerles atajo. ¿Se espera una considerable escala de violencia o actos de brutalidad dramática para salir de nuestra indiferencia? Constituye un problema social, no es un problema aislado, por lo que debemos enfrentarlo colectivamente, sin ignorarlo, si no se quiere potenciarlo.
Estas conductas de violencia familiar o doméstica contra la mujer van en desmedro de la sociedad en su conjunto, pues se trata de un comportamiento secuencial, que pasa de abuelos a padres y de padres a hijos o viceversa.
Quienes han vivido en familias violentas es seguro que también tienen un comportamiento violento, lo que hay que combatir.
Las diferentes formas de expresión de la violencia familiar, como violaciones a menores de edad, vejaciones de padres a sus hijas, hijastras o incluso asesinatos y homicidios domésticos, con daños físicos y psicológicos, provocan traumas de por vida en las víctimas.
La violencia familiar ha sido poco tratada debido a que resulta difícil vencer la resistencia proveniente de creencias sociales, políticas y culturales. En este sentido, es un problema muy complejo, por las variables socio-económicas y culturales. La experiencia demuestra que quienes vienen de familias donde se practica la violencia familiar, llevan consigo gran parte de las secuelas de estos actos, contribuyendo a la desintegración de la familia, debilitando los valores de ésta.
En nuestro medio las causas de la violencia familiar son diversas, las hay de orden económico, social, que derivan de la educación recibida, etc. La violencia familiar es un factor que puede modelar la personalidad de los sujetos, influyendo hasta en la manera de razonar, en los valores y principios morales y también puede originar prejuicios y mitos.
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