Estudios hidráulicos en Alalay

La empresa consultora URS comenzó con los trabajos de la primera fase hidráulica del proyecto a diseño final de la recuperación de la laguna Alalay. Se espera tener los resultados de la batimetría que determinarán las acciones para el dragado para el siguiente mes informó el secretario de Desarrollo Sustentable de la Alcaldía, Eduardo Galindo.

Señaló que se esperan los resultados de la primera fase de la consultoría en los siguientes cinco meses. “Esperamos que hasta febrero, aproximadamente, tengamos lista la parte hidráulica, que es la más complicada, porque hablamos de los afluentes y la descontaminación del agua”, afirmó Galindo.

Las otras dos fases corresponderán a los temas de biodiversidad y mejoras arquitectónicas. Estas demorarán cerca tres meses más. “Esperamos que una vez se tengan los resultados, se vea el real compromiso de todas las entidades que comprenden el Crempla (Comité de Recuperación y Preservación de la Laguna Alalay)”, agregó.

Por otro lado, el secretario también señaló que en octubre se tendrán los resultados de la batimetría para el dragado. El objetivo es conocer cuánto lodo hay, de qué está compuesto y cuál sería la forma más correcta de disponerlo.

Por el momento, el POA de 2018 sólo contempla un monto entre 8 y 10 millones de bolivianos para los trabajos recurrentes y de limpieza de la laguna Alalay. Mientras tanto, se observa que el espejo de agua no tiene mejoras y tampoco cuenta con peces.

Pese a que se aprobó el plan de contingencia, no se está aplicando plenamente, pues no se cuenta con la totalidad de los recursos, 5 millones de bolivianos. La Alcaldía está aportando con 2,6, pero se requiere más presupuesto para las siete tareas.

Estudios realizados en 2016 mostraron los elevados niveles de concentraciones salinas, el olor fétido y la muerte de peces evidenciaron que la contaminación es alta en la laguna Alalay y que el plan de emergencia no ha sido efectivo. Pero su estado también es una consecuencia de la dejadez de los últimos años por implementar acciones integrales en la cuenca Maylanco y el río Rocha que alimentan de agua al embalse.

Después del desastre registrado el pasado año que provocó la mortandad de más de una tonelada de peces y varias especies de aves silvestres, los expertos señalan en que la situación de la laguna no es una de las mejores.

De acuerdo al último análisis fisicoquímico, los niveles de concentración de amonio y fosfato son esencialmente mayores a los registrados en 2016. El amonio que tenía un nivel de 2,7 ahora presenta 3,10 mg/l, cuando el nivel máximo es de 1,0 a 2,0; el fosfato pasó de tener en agosto 1,23 mg/l a 1,30 mg/. En tanto el Ph es de 9,92 y debería oscilar entre 7 y 8.

El embalse se alimenta sobre todo del río Rocha con un aporte del 52 por ciento y las lluvias representan el 18 por ciento.