Dos grandes fabricantes japoneses Toyota y Mazda han realizado un acuerdo estratégico por el que invertirán 1.600 millones de dólares en construir de forma conjunta una nueva planta en Estados Unidos y también por el que Toyota se hará con un 5% en el capital de Mazda, mientras que esta adquirirá un 0,25% de las acciones de Toyota.
En un comunicado conjunto, Toyota y Mazda indicaron que este nuevo acuerdo servirá para reforzar la colaboración que mantienen desde hace años y explicaron que, además de esta cooperación a largo plazo, también han sellado un intercambio de capital con el que se conserva la independencia y la equidad entre las dos firmas.
A través de esta alianza accionarial, Toyota adquirirá 31,92 millones de acciones de Mazda de nueva emisión a través de un tercero, mientras que Mazda adquirirá títulos de Toyota por el mismo valor. De esta forma, Toyota se hará con un 5,05% del capital de Mazda, mientras que esta comprará el 0,25% de Toyota.
Las dos compañías tienen previsto aplicar procedimientos para el aumento de capital a través de una distribución con un tercero. Además, no descartan reforzar esta alianza de capital en el futuro, según avance su alianza de negocio.
NUEVA PLANTA EN EEUU Por otro lado, las dos firmas han acordado la puesta en marcha de una ‘joint venture’ en Estados Unidos, a través de la que construirán una nueva factoría en el país, para lo que invertirán 1.600 millones de dólares (1.454 millones de euros).
La previsión es que, una vez que esté operativo, este centro permita la creación de unos 4.000 puestos de trabajo y que cuente con una capacidad de producción anual de 300.000 vehículos de las dos marcas.
Así, Mazda prevé fabricar nuevos modelos todo camino para su introducción en el mercado norteamericano, mientras que la corporación que preside Akio Toyoda tiene previsto ensamblar el Corolla para su venta en Norteamérica.
Al mismo tiempo, las dos empresas explorarán de forma conjunta tecnologías vinculadas con los vehículos eléctricos y señalaron que estos avances buscarán dar respuesta rápida a las necesidades y a las exigencias legales en cada uno de los mercados.
Por otro lado, también han acordado trabajar en el desarrollo de nuevas tecnologías de infoentreteniento y multimedia para su incorporación a los vehículos, con el fin de prepararse ante el aumento previsto del uso de la demanda de conectividad en los automóviles.
Por último, Mazda y Toyota reforzarán, a su vez, su cooperación en el suministro de vehículos. En la actualidad, Mazda provee un sedan compacto a Toyota en Estados Unidos, al tiempo que esta suministrará un vehículo comercial a Mazda en Japón. Las dos firmas explorarán la posibilidad de ampliar a más modelos esta colaboración.
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