Virgen de Copacabana fue entronizada en el Vaticano

La imagen de la Virgen de Copacabana fue entronizada ayer en los jardines del Vaticano, en un acto que contó con la participación de los obispos bolivianos, además de representantes de la Santa Sede y el Estado boliviano.

“Podríamos decir que estos jardines se están volviendo en los jardines de la Virgen”, manifestó el cardenal Gioseppe Bertello, presidente de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano, a tiempo de recordar que desde hace unos años se bendicen de esta manera imágenes de la Virgen, venerada en Latinoamérica.

Bertello destacó el rol de la Virgen de Copacabana en la historia de la evangelización en Bolivia y manifestó su deseo de que la entronización sea un símbolo de la comunión entre la Iglesia de Roma y la boliviana.

Los obispos bolivianos visitaron el lunes al papa Francisco en el Vaticano para hablar de temas pastorales y otros de preocupación de la Iglesia. Este viernes se los observó sonrientes en el acto por la entronización de la Virgen.

El embajador boliviano ante la Santa Sede, Julio César Caballero, indicó que la entronización realza la religiosidad de la mayoría de los bolivianos y la fe que tienen en la “mamita de Copacabana”.

El diplomático dijo que la Virgen nos llama a un encuentro sincero y sin exclusiones. Manifestó que se debe demostrar que podemos dialogar de forma transparente y sincera, aún en nuestras diferencias, para la construcción de una sociedad plural.

LA IMAGEN

La imagen de la Virgen de Copacabana es una hermosa obra de arte sacro que estará en los jardines vaticanos, primorosamente elaborada en la antigua técnica del mosaico italiano, enmarcada en mármol con detalles que evocan a su santuario en la población de Copacabana-Bolivia a las orillas del lago Titicaca, el más alto del mundo.

Su historia se remonta a los tiempos de la colonia española cuando en territorios del Alto Perú, los monjes dominicos encargaron el tallado en madera de la Virgen de la Candelaria. Fue así que Francisco Tito Yupanqui, el indígena aimara que luego sería reconocido como siervo de Dios en proceso de beatificación, talló en madera la imagen de la Virgen María, con rostro moreno y ornamentos que realzan su origen.

Esta imagen con la advocación mariana fue nombrada como Virgen de Copacabana cuyo altar se encuentra en el municipio del mismo nombre en el departamento de La Paz. Es una expresión de fe del pueblo boliviano que la reconoce como patrona de Bolivia.