La tormenta tropical Nate se dirigía ayer a los populares centros turísticos de la península mexicana de Yucatán, tras dejar al menos 26 muertos, decenas de desaparecidos y miles de personas en riesgo en Centroamérica.
Nate estaba el viernes a 370 kilómetros al sureste de la turística isla mexicana de Cozumel con vientos máximos sostenidos de 72 kilómetros por hora, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) en Miami.
El centro de la tormenta se movía a 23 kilómetros por hora con rumbo noroeste, con lo que el CNH prevé que llegue el viernes al borde este de la Península de Yucatán, donde están los centros turísticos Cancún y Playa del Carmen.
En Centroamérica, Nate arrasó con caminos y pueblos, desbordó ríos y derribó árboles, dejando a su paso al menos 11 muertos en Nicaragua , ocho en Costa Rica , dos en Honduras y uno en El Salvador, según autoridades locales de protección civil.