Proyecto de planta de tratamiento de aguas residuales paralizado

Tarija.- La respuesta que dio el Viceministerio de Saneamiento Básico por el informe de condiciones previas (ICP) sobre la planta de tratamiento de aguas residuales para la ciudad de Tarija, causó un disgusto al Gobernador, Adrián Oliva Alcázar, quien acusó, que el Gobierno central “no tiene voluntad” para resolver el problema, al comparar con las acciones asumidas a favor de Cochabamba, donde invirtió al 100% de un proyecto de similar magnitud.

Sobre este tema, el concejal, Alan Echart Sosa, recordó que el Gobierno a través del Viceministerio de Saneamiento envió un documento la comisión encargada de la construcción de la planta respecto a un término de referencias para que contrate una empresa que haga un estudio del estudio final del proyecto por un monto de Bs 3 millones, aproximadamente.

“Llama la atención que estos términos, le ponen un plazo de 300 días calendario para que la empresa entregue el estudio a diseño final”, cuestionó Echart.

El concejal indicó que haciendo un cálculo, si inicia ahora el proceso de contratación de la empresa como quiere el Gobierno, el tiempo mínimamente se prolongaría por tres meses.

A partir de ahí, correría el plazo de 300 días para que la empresa presente el estudio a diseño final. “Estamos hablando que hasta finales del año 2018 se estaría concluyendo el estudio”, refirió.

Pasado ese tiempo, procederían a debatir el financiamiento, que al tardar tres meses, deberá licitar después el proyecto de construcción de la planta, que demande otros seis meses como mínimo.

“Es decir que a finales del 2019, tendríamos a una empresa contratada para ejecutar la construcción de la planta, el proyecto tardaría de dos a tres años, entonces, en el mejor de los casos, si es que no hay impugnaciones, el 2023 estaría la planta de tratamiento, esa es la propuesta del Gobierno”, criticó Echart.

GOBERNADOR

La Gobernación al momento de anunciar el informe, propuso licitar el proyecto bajo la modalidad de llave en mano, para que no se prolongue el tiempo de la ejecución de la planta, al ser una necesidad inmediata por el colapso de las lagunas de oxidación en San Luis.

“No creo que Tarija tenga que esperar, lo tengo que decir con mucha tristeza que hasta el año 2022 recién tengamos la planta de tratamiento, es fundamental que todos trabajamos en una solución inmediata”, explicó el Gobernador.

También se refirió a la planta de tratamiento de Cochabamba. “Celebro por Cochabamba que haya resuelto su problema de aguas residuales, que se esté ejecutando, que haya financiamiento para la planta”, resaltó Oliva.

Pero al mismo tiempo, el gobernador lamentó que en Tarija se hubiese iniciado primero la gestión para la planta con el Gobierno, y que le respondan que el proyecto esté cerca del año 2022.

Para Oliva, esta actitud del Gobierno Nacional, demuestra que no hay la misma voluntad para construir la planta de tratamiento de Tarija, pidió “honestidad” con los tarijeños.

El Gobierno en su defensa, asegura que el informe presentado por la Gobernación, tiene serias observaciones técnicas, al no tener una ubicación definida ni la socialización con los directos afectados. (El Periódico)