El presidente catalán, Carles Puigdemont, afronta este jueves el plazo final que le dio el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, para desistir de la independencia, pero aunque ambos reafirman su disposición al diálogo, sus puntos de partida son tan distintos que todo apunta a que no habrá marcha atrás en el plan secesionista y se desatará una inédita intervención en la comunidad autónoma de Cataluña.
Puigdemont insiste en que su oferta de diálogo es sincera, aunque quiere hablar únicamente del derecho de autodeterminación de Cataluña.