Monseñor condenó a corruptos

Santa Cruz.- El arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, rechazó la represión contra los denominados “hombres topo” y dijo que la condena debe orientarse hacia los corruptos.

La Iglesia Católica convocó a combatir la corrupción de “guante blanco” y se solidarizó con los denominados “hombres topo” que fueron objeto del rechazo de los vecinos de varias zonas de Santa Cruz.

Durante su homilía dominical, el arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio Alberti, lamentó la intervención para sacar por la fuerza a los llamados “hombres topos” y aseguró que la lucha no debe ser contra “los hermanos necesitados de medidas que les ayuden superar sus dependencias, sino en contra de delincuentes como los corruptos que, aprovechando su poder, con guantes blancos se apropian de los bienes públicos destinados al bien común”.

Recordó que el papa Francisco dijo que “el corrupto se cree un vencedor, se pavonea para menospreciar a los otros, no conoce la hermandad o la amistad sino la complicidad o la enemistad” y calificó la corrupción como “un proceso de muerte que se ha vuelto habitual en la sociedad y la peor plaga social porque genera gravísimos problemas y crimines que implican a todos”.

Alberti también convocó a la solidaridad cristiana con loa migrantes y recordó que según los preceptos cristianos “Quien dice amar a Dios y no ama a su hermano es un mentiroso”.

Convocó a luchar en contra de toda xenofobia y a “compartir en igualdad de oportunidades los bienes de la creación, derribando fronteras y muros”.

Dijo que entre los migrantes se cuentan no sólo a quienes dejan su tierra natal en busca de nuevas oportunidades de vida, sino también refugiados que huyen de la persecución política o religiosa, o víctimas de trata y tráfico de personas.

Alberti concluyó su homilía exhortando a no ceder “al avance del Hallowen” a la que calificó de una evocación pagana y convocó a celebrar la fiesta de Todos Santos “con cariño por los seres queridos y mucha fe y esperanza”. (ANF)