A la conclusión de su 73ª Asamblea General, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) denunció ayer que en el continente americano se ha consolidado un patrón de agresiones contra el periodismo que proviene tanto del crimen organizado como de los gobiernos.
“La violencia en contra de los periodistas y los medios, la proliferación de leyes y proyectos que intentan controlar la actividad periodística, unidos a las presiones de parte de las autoridades y a la falta de acceso a las informaciones oficiales” son, según la SIP, los principales obstáculos a la libertad de prensa.