Detención preventiva para trabajadora social

En el Juzgado Octavo de Instrucción en lo Penal se determinó la detención preventiva para la trabajadora social en servicio de patología del Hospital Obrero, a tres de los acusados se les dictaminó detención domiciliaria y una se benefició con la libertad pura y simple, según declaró la fiscal del caso Lilian Calderón.

De acuerdo con la explicación de Calderón se determinó la detención preventiva en el Centro de Orientación Femenina (COF) de Obrajes a Virginia Paredes, ex trabajadora social del nosocomio, debido a que aparentemente habría estado involucrada en algunos manejos económicos para la realización de las pruebas para particulares.

Para Carlos Ibáñez (director del Hospital Obrero), Alonso Padilla (jefe de Patología) y Fridda Rosales (auditora del Hospital) se determinó la detención domiciliaria y para Narda Mazuelos (médico residente) se determinó la libertad pura y simple.

La fiscal afirmó que el juez Orlando Rojas habría evidenciado que existió la falta de incumplimiento de deberes, por parte del director del nosocomio, Carlos Ibáñez, precisó que hace seis meses atrás fue posesionado en su cargo coincidente con el tiempo de la denuncia y supone que habría tenido pleno conocimiento de lo ocurrido.

Manifestó que hubo una falta de control total, puesto que el patólogo Alonso Padilla, también involucrado en el hecho, declaró que alertó al director sobre el desvío de insumos en el Hospital Obrero.

La fiscal aseveró que por los comentarios de los imputados se conoce que luego de la intervención se habrían realizado alrededor de 12.000 pruebas y antes de la intervención se habrían realizado 30.000 pruebas, por lo que se presume que, aproximadamente, 18.000 pruebas habrían sido para personas particulares.