Harare (Zimbabue).- Las Fuerzas Armadas de Zimbabue se rebelaron ayer contra el gobierno de Robert Mugabe y tomaron el control del país, tras confinar al presidente en su casa y arrestar a varios de sus ministros, todos ellos identificados con la facción del oficialismo alineada con la primera dama Grace Mugabe.
Aunque que los portavoces militares insistieron, en un mensaje televisado la pasada madrugada, en que no se trata de un golpe militar para tumbar al Ejecutivo, sino de una operación contra “criminales” del entorno del mandatario, el presidente de la vecina Sudáfrica, Jacob Zuma, confirmó que Mugabe se encuentra retenido en su residencia, pero que “está bien”.