La Policía y el Ministerio Público investigan el asesinato de las hermanas Blanca y Marina M. Las primeras hipótesis apuntan a un albañil que días antes habría realizado algunos trabajos en el domicilio de las víctimas.
La noche del martes pasado, un sobrino de las víctimas llegó hasta la vivienda de las dos ancianas en la calle 43 de la zona de Chasquipampa y descubrió el macabro hecho.
Marina (71 años), una de sus tías, yacía muerta en la sala en medio de un charco de sangre con el cráneo destrozado y al lado la piedra y el cuchillo con la que la asesinaron. Un piso arriba estaba Blanca (80 años), recostada en la cama asfixiada con una almohada.
El hecho fue denunciado a la Policía de la zona Ssur que investiga este doble asesinato que conmocionó a los vecinos.
Una primera hipótesis que maneja la Policía es que sea el albañil, quien está prófugo, el posible responsable de este hecho de sangre, informó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de la zona Sur, coronel Sergio Bustillos.
“No tenemos una información clara sobre con quiénes frecuentaban pero estamos en la labor investigativa”, dijo.
Informó que se identificó a un sospechoso y se trataría de un individuo con antecedentes penales que es buscado por la Policía. Este individuo días antes del crimen habría sido contratado por las víctimas para realizar trabajos de albañilería.
La madrugada de ayer, efectivos de la División de Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de la zona Sur procedieron a realizar el levantamiento legal de los cuerpos de estas dos personas de la tercera edad que se encontraban al interior de un domicilio de la calle 43 de la zona de Chasquipampa al sur de la ciudad.
La Policía presume inicialmente que se trata de un caso de robo, que terminó con el asesinato de las dos adultas mayores.
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