Seúl.- Corea del Sur y Estados Unidos iniciaron maniobras aéreas a gran escala que suponen una nueva exhibición de fuerza ante Corea del Norte después de que el régimen de Kim Jong-un lanzara la pasada semana un nuevo misil intercontinental.
Estas maniobras, llamadas “Vigilant ACE”, “buscan mejorar la capacidad operativa combinada de los dos países tanto de día como de noche y en cualquier condición meteorológica”, explicó a Efe un portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano.
El Ministerio no quiso confirmar si se trata de las mayores maniobras aéreas jamás realizadas entre Washington y Seúl, aunque medios locales insistieron en que son las mayores que se recuerdan, con 230 aeronaves y unos 12.000 efectivos involucrados.
En los ejercicios, que concluyen el próximo 8 de diciembre, participan por parte estadounidense dos docenas de cazas furtivos, como el F-22 o el F-35, y dos bombarderos estratégicos B-1B. (EFE)