Los retos para el 2018

Una asignatura pendiente de los medios es recuperar su independencia editorial, muchos de ellos han dejado de ser referentes de lo que pasa en nuestro país y se han convertido en simples correas de transmisión de lo que algunos sectores quieren que se informe.

Vemos a los periodistas y comunicadores en una disyuntiva: o se alinean con los poderes establecidos o practican la “autocensura”, pero raras veces se atreven a decir su verdad.

El tema es que los medios y los mediadores no deberían alinearse con el poder, tampoco deberían alinearse con los sectores que enfrentan al poder, lo único que deberían hacer es informar acerca de la realidad.

No se trata de ser imparciales, objetivos o neutrales. Se trata de ser “veraces” a la hora de informar. Se trata de decir “la verdad”.

El periodismo debe ser una luz que destaque las cosas buenas y resalte las cosas que deben ser corregidas.

Más allá de la pregonada objetividad, los periodistas deben ser militantes, deben estar comprometidos (no con esta o aquella causa, no con este o aquel personaje), los periodistas deben estar comprometidos con la verdad y ser militantes de la libertad de expresión.

Si los periodistas callan o tergiversan las informaciones, si maquillan la realidad o la ignoran, si la destacan o la minimizan, están haciendo periodismo subjetivo e interesado. Cualquier sociedad del mundo precisa contar con un periodismo libre de presiones económicas, políticas y culturales.

Muchos periodistas tienen la voz embargada, por eso, una de las metas del 2018 debe ser recuperar la voz propia y el valor para informar lo que se debe informar.

(*) Director ejecutivo de Xperticia. Empresa de Capacitación y Asesoramiento en Comunicación. (Sigue a Gabriel Astorga y Xperticia en Facebook).