Unidad de Zoonosis de Alcaldía
• Para la gestión 2018 la unidad municipal planifica contar con un vehículo veterinario
La norma nacional sobre protección a los animales obliga a los propietarios a dar buen trato a sus mascotas y prohíbe echarlos las calles para que busquen su alimento, con el riesgo de contagiarse con enfermedades y morder a los transeúntes, además al ser considerados canes vagabundos son maltratados por los vecinos en las diferentes zonas de El Alto, aún está en análisis los posibles castigos para los dueños que abandonen a sus perros.
La Unidad de Zoonosis aseguró a EL DIARIO que el proceso de sociabilización a la población sobre los peligros de salud pública que se generan cuando se enfrenta una mordedura de perros, ha permitido que la población denuncie a tiempo y se logre el análisis de los canes para controlar los casos de rabia.
El responsable de dicha unidad, Rolando Yujra, dio a conocer que el año 2016 se logró atender 1.800 denuncias de mordedura de perros, mientras que en la presente gestión dicha cifra llego a 3.500 denuncias atendidas, sobre mordeduras de canes, sobre todo callejeros, lo que representa un incremento de 194.4%.
AUMENTAN DENUNCIAS
"Ese incremento se debe sobre todo a las diferentes tareas de sociabilización que se dieron en las zonas, sobre todo periurbanas, con la finalidad de que la población asuma el derecho a la denuncia de manera responsable y esté alerta ante el cambio, incluso de conducta de sus propias mascotas", añadió.
Tomando en cuenta que las enfermedades de rabia en los perros es irreversible y genera riesgos en la salud de las personas y el entorno de la familia, es que al menor caso de mordedura, se acude de inmediato, se hacen los análisis correspondientes por laboratorio, para descartar o aprobar la dosificación de inyección a las personas afectadas y evitar un caso de rabia en humanos.
RABIA
De las 3.500 mordeduras que se presentaron en la presente gestión solo 10 salieron como resultado positivo para rabia, lo que representa que es el 0.28% de casos de rabia canina, en una cantidad de 265.000 perros registrados hasta el momento en el municipio de El Alto.
De los 10 casos de rabia canina, que se reportaron como positivo, solo tres de ellos, fueron catalogados como rabia muda, que si bien este tipo de casos puede o no presentar síntomas en el animal contagiado, "porque dichos animales, registran que fueron vacunados en campaña y que pese a que recibieron la dosis antirrábica, los animales al estar expuestos permanentemente en la calle y en contacto con otros animales infectados, fueron ser contagiados", aclaró Yujra.
La rabia muda, atendida en la presente gestión, surge por diferentes aspectos, una de ellas muy común, se debe a la posibilidad de que las brigadas de vacunación que participan en las actividades, puedan generar riesgos a la dosis, rompiendo la cadena de frío o realizando una inadecuada manipulación a las vacunas, aspecto que al momento de inyectar al animal (perros o felinos), puede ser que el componente químico de las mismas no logre el efecto deseado de lograr que sean protegidos ante el contagio de rabia de otros animales callejeros, que no fueron controlados.
"Estos perritos que dieron positivo a la rabia presentaron síntomas, de no querer comer, aislamiento o en el transcurso de los días presentaron síntomas de parálisis de sus extremidades o finalmente la muerte repentina. Es por eso que gracias al Instituto Nacional de Laboratorios de Salud (Inlasa) se logró identificar a tiempo y realizar las atenciones de prevención en las personas que fueron mordidas, que en algunos casos fueron familias enteras", estableció.
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