El Tratado de la Cuenca del Plata y el Mercosur

En 1969, Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay firmaron en Brasilia el Tratado de la Cuenca del Plata, mediante el cual se acuerda promover, estudiar programas y obras en áreas de interés común y la adopción de medidas para la navegación fluvial. En 1987, en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) los cancilleres de aquellos países aprobaron la resolución Nº 210, declarando de interés prioritario el desarrollo del sistema Paraguay-Paraná. En 1989, en la XIX Reunión de Cancilleres de la Cuenca del Plata, por Resolución Nº 238 se creó el Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná, con el propósito de garantizar la navegación diurna y nocturna de convoyes formados por barcazas, con el menor costo posible.

Asimismo el programa se basa en el aprovechamiento de las condiciones naturales del sistema hídrico. También esto conlleva el diseño de estrategias y políticas alternativas de sustentabilidad para el conjunto de los recursos naturales y los procesos ecológicos de la región.

Se constituyó el Comité Intergubernamental Coordinador de los países de la Cuenca del Plata (CIC) como organismo permanente encargado de promover, coordinar y seguir la marcha de las acciones multilaterales, la asistencia técnica y financiera con el apoyo de organismos internacionales.

Lamentablemente, Bolivia no utiliza las amplias ventajas comparativas de la HPP, como sí lo hacen Argentina Brasil, Paraguay y Uruguay, pese a que todos estos países tienen iguales derechos y facilidades portuarias. Aquellos países siempre tienen iniciativas en el Tratado y Bolivia no, ¿por qué tanta indiferencia?

El Fondo Financiero de la Cuenca del Plata es parte del Tratado y ha financiado el estudio de la “Visión de Negocios” del eje HPP, identificando los requerimientos de infraestructura física intermodales que promuevan el desarrollo de las regiones que lo integran. Se determinó que los recursos económicos con los que cuenta Fonplata sean distribuidos equitativamente para los 5 países y una mejora preferencial en las tasas de interés para los países menos desarrollados como Uruguay, Paraguay y Bolivia.

Fonplata con una visión objetiva de la realidad y establecidos los altos costos financieros que significa ejecutar obras en materia de infraestructura vial, ferroviaria y portuaria, ha adoptado una valiosa forma de decisión al establecer coordinación con la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA), en el entendido de que esta institución cuenta con mecanismos de coordinación entre gobiernos, dos entidades financieras multilaterales como el Banco de Fomento (CAF) y el Sector Financiero de la Región (SFR) de tal forma de cumplir los objetivos propuestos por los países de la Cuenca del Plata.

En cuando a la HPP, el primer trabajo se refirió a elaborar una “Visión de Negocios del Eje” para el desarrollo de los integrantes del Tratado, su tránsito seguro a lo largo del sistema, su capacidad de carga y su valor agregado hasta alcanzar la salida al océano Pacífico y ganar los mercados de Europa y África

En lo que a Bolivia se refiere, Fonplata e IIRSA tomaron en cuenta la ampliación del Aeropuerto de Viru-Viru, la construcción de 4 tramos de la carretera Montero-Cristal Mayu, reconstrucción de la carretera Yotau-Ascensión de Guarayos, el puente de frontera, La Quiaca-Villazón y el proyecto de rehabilitación del tramo vial San Ramón-San Javier-Concepción-Río Uruguayito. A las autoridades respectivas del gobierno corresponde informar si estas obras ya han sido ejecutadas.

En cuanto al Mercosur se refiere, este organismo regional mantiene una íntima relación con el Tratado de la Cuenca del Plata. Al respecto, corresponde citar las siguientes declaraciones de don Juan Pablo Saucedo, asistente de la Gerencia Técnica del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, que a la fecha cobran actualidad: “El Mercosur ofrece oportunidades y desafíos para la producción nacional. Si bien ya se tiene un Acuerdo de Complementación Económica, en el que se incluye las preferencias de las que goza Bolivia y una vez que sea miembro, el panorama no cambiará, pero en las negociaciones se sugiere la participación del sector privado para lograr la flexibilidad arancelaria del Arancel Externo Común... El país debe ingresar como miembro pleno a este bloque, tomando en cuenta que supondría un cambio en la estructura económica del país”. (EL DIARIO 19/5/2015).

El primer mandatario ha puesto énfasis en actualizar la adhesión de Bolivia al Mercosur, aclarando que esta incorporación sería en el marco jurídico, económico y físico, que contribuya a la creación de un espacio que tienda a facilitar la libre circulación, de bienes y servicios así como la plena utilización de los componentes productivos.

Esta importante propuesta en beneficio del país ¿será posible que se haga realidad junto a lo que corresponde al Tratado de la Cuenca del Plata? Tienen la palabra los ministerios respectivos del actual gobierno.