Aprender para amar la vida

Debemos educar para amar la vida. En la preparación de nuestros hijos no se debe prescindir de palabras como: “vida” y “amar”, estas deben ser las esenciales cuando hablamos de educación, pero muchas veces ni siquiera las mencionamos; los niños y los adolescentes necesitan dos ingredientes para tener ganas de hacer algo bueno con su vida, sentirse amados y sentir que la vida es linda, y vale la pena.

En este proceso de enseñanza son importantes que los padres asuman la responsabilidad de ser personas que aman la vida para que incentiven en sus hijos la alegría de ser y de vivir en un ambiente de amor, solidaridad y ternura. La educación con el propósito claro de amar la vida nos propone en un contexto revelador, valiente y propositivo, que finalmente contagia amor y alegría en el momento de educar a los hijos.

En opinión Eva Bach, autora del libro titulado Educar para amar la vida, podemos ayudar a nuestros hijos a apostar por la vida frente a los retos que nos están alarmando, razón por las que debemos ser cautos al tratar diversos temas que son parte de la vida.

La motivación para amar la vida – afirma – debe ser una constante que permita una sólida preparación de los hijos con la finalidad de prevenir pensamientos adversos en los jóvenes, como por ejemplo sentimientos que les impulsen a quitarse la vida. El aprender a amar debe tender a disminuir los datos negativos que afirman que “las tasas de depresión y ansiedad entre adolescentes han aumentado en 70% en los últimos 70 años”.

En esa línea la misión debe estar centrada en amar a nuestros hijos, en escucharles, observarles, comprenderles para orientarles, en un entorno comunicativo fraterno y lleno de solidaridad.

AMOR DIMENCIONAL

En su opinión los padres de familia tenemos una importante influencia en los hijos y usarla bien es indispensable para proporcionarles las herramientas que necesita para llegar a ser una persona plena y feliz.

Lo más importante que vamos a enseñarles a los niños es el amor en todas sus dimensiones. Para ello es necesario enseñarle a amar todo lo que le rodea y sus distintos significados, un amor en todas las dimensiones.

APRECIAR LAS COSAS

Los padres –afirma– deben enseñar a los niños a apreciar el valor de las cosas, para ello es importante que conozcan que el amor nace dentro de uno mismo y se extiende hacia nuestro entorno, de adentro hacia afuera.

En este sentido educar a los hijos como amar, respetar y apreciar el valor de las cosas de la vida y valorarlas, es uno de los primeros pasos que todo ser humano deber aprender. Todo padre y madre de familia tendría que proponerse a enseñar estas virtudes.

QUE SEPAN QUE SON AMADOS

De acuerdo a la experta, los hijos deben saber que son amados. Darles amor reafirma su autoestima y les da certezas sobre la vida. Estos sentimientos deben ser transmitidos con muestras de aprecio sincero con abrazos sin medida, besos, muchas caricias, escucha activa y atención cuando la pidan y cuando la necesiten.

No debemos negar a los hijos nuestra compañía ni consuelo. No cometamos el error de descargar en ellos nuestras frustraciones, por el contrario debemos tratar a los niños como desearíamos que nos traten a nosotros, lo que fortalecerá el amor verdadero en ellos.

ENSEÑAR A AMARSE

En la educación de los hijos es muy importante que les enseñemos primero a amarse y luego a aceptarse. Con ello también debemos generar la aceptación de la familia, que será la base para fortalecer la autoestima de los niños y, por ende, en amor por sí mismos. No olvidemos que el amor a mismo es indispensable para comprender lo valiosos que son los niños como personas, además aprenderán a respetarse.

Esta actitud permitirá a sus hijos enfrentar los retos y dificultades de la vida, con la mejor herramienta que existe, el amor. Y puesto que los niños asimilan lo que le transmiten los padres siempre debemos hacerles saber que creemos en ellos y en su capacidad, y que nadie tiene derecho a dañarlos.

LA GENEROSIDAD

Es importante enseñar a los hijos a ser compasivos. Este sentir no sólo debe reflejarse en teoría, sino de inicio con pequeños actos de bondad.

Deje que sus hijos se involucren en actividades en donde donen su tiempo a una temprana edad. Cuando los niños hacen pequeños actos bondadosos, sienten más respeto por sí mismos y obtienen una inyección de felicidad.

APRENDER DE LOS ERRORES

Es necesario enseñar a los niños que los errores pueden ser importantes para aprender y comprender cuál es el camino adecuado para desarrollarnos como seres humanos.

Los padres de familia deben enseñar a los hijos que no sólo se aprende de las cosas positivas, sino también que los errores que en algún momento se presentan en nuestras vidas. Cada acontecimiento es una oportunidad para conocernos más y conocer a los demás.

AMAR Y COMUNICAR

Eduque a sus hijos con la finalidad que demuestren su amor por medio de la comunicación. El contacto comunicativo debe reflejar sentimientos de ternura y aprecio por la otra persona.

Pregúntenles cómo están, cómo les fue en la escuela y qué tipo de día tuvieron. Pregunte cosas que necesitan más respuesta, que un simple sí o no y sea amable al escuchar cuando se comunique con sus hijos.