Cuando usted incrementa el gasto de energía y participa en ejercicios físicos extenuantes, puede perder tanto como dos litros de agua por hora. Y por eso el entrenador insiste en decirles que beban.
Otra manera de calcular la cantidad de agua que su cuerpo necesita es considerar la cantidad de calorías que están quemando. Por cada caloría que quema, necesita alrededor de un mililitro (o sea un centímetro cúbico) de agua. Una persona activa trabajando o jugando duro quema de 4.000 a 5.000 calorías por día y necesitará de 4,5 a cinco litros de líquido.