Isidre Esteve y la tecnología en la Dakar

Repsol Isidre Esteve es un piloto español presente en esta última versión del Dakar que pasó por nuestro país. En 2007 sufrió un accidente que le causó una grave lesión medular y le remitió a una silla de ruedas. Gracias a la tecnología el cuenta con un vehículo modificado que le permite estar en una de las pruebas mas exigentes del mundo.

Por su paso en La Paz Repsol presentó al Repsol Rally Team que participa en la competencia Dakar 2018. Su piloto Isidre Esteve avanza a paso firme para cumplir su desafío; competir de igual a igual con los vehículos oficiales y acabar entre los 20 primeros.

El uso de lubricantes formulados para las condiciones extremas como lo son los lubricantes Repsol, es un factor crítico para este tipo de competiciones y así evitar averías y mayor desgaste por falta de protección entre piezas metálicas. El Dakar 2018 cuenta con recorridos de cerca de 9000 kilómetros y se desarrolla a través de distintas condiciones geográficas pasando desde inhóspitas dunas del desierto a alturas cercanas a los 4.000 metros sobre el nivel del mar. Repsol comparte los niveles de esfuerzo, dedicación, superación, trabajo en equipo e innovación con Isidre Esteve. Esta alianza permite poner a prueba los lubricantes a las altas exigencias que presenta el Dakar y aplicarlas en el diseño de los productos Repsol. Lo que asegura el óptimo funcionamiento del vehículo en las condiciones más extremas.

En esta oportunidad, el Repsol Rally Team cuenta con un potente prototipo Sodicars BV6 con los mandos adaptados al volante. Isidre Esteve afirma “Mi discapacidad ya no me impide ser competitivo de verdad”, como lo ha demostrado en los rallys previos de Baja Aragón y Marruecos, tras haber acumulado casi 4.000 kilómetros a lo largo del año, entre carreras y prácticas.

La positiva experiencia vivida en el Dakar 2017 también está jugando a su favor, ya que le permite estar sentado durante muchas horas sin daño físico. “ El año pasado pudimos comprobar la eficacia del cojín inteligente y que mi discapacidad no representa ningún problema para ser competitivos de verdad. Todo funcionó y por eso ahora podemos olvidarnos de mi salud y centrarnos sólo en ser competitivos”, afirma Isidre que vuelve a estar acompañado de su copiloto, Txema Villalobos.

El Cojín Inteligente fue desarrollado durante cinco años a través de la fundación que lleva su nombre, que previene los riesgos de úlceras por presión en los isquiones a personas con discapacidad física y movilidad reducida. Así, la mejor forma de probar este dispositivo con sensores de presión que oscilan con el movimiento, fue que lo hiciera el propio Esteve durante la disputa de la carrera. Con un miembro del equipo médico que medía cada día cómo sufría su piel tras largas jornadas de conducción, los resultados fueron muy satisfactorios.