Tres recursos naturales en abandono

Si hay un enorme foco de contaminación en La Paz, ese es el río Choqueyapu, el cual recibe sin ningún control toda clase de deshechos e inmundicias en perjuicio del medio ambiente y de verduras y hortalizas de Río Abajo, de consumo de la población. Todas las actividades productivas, las industrias y el público vierten toda clase de elementos contaminantes al Choqueyapu. La depredación más grave, sin duda, proviene del Centro Municipal de Faenéo, más conocido como Matadero.

De 70 a 100 reses por día son faenadas para servicio de los habitantes, toda la cantidad de sangre y heces se echa a este río. No hace mucho el alcalde Luis Revilla dijo tener un plan de tratamiento de aguas servidas para el Matadero, pero la situación sigue como fue desde 1932, año del funcionamiento de dicho Centro. Un tema que no figura en los proyectos municipales ni nacionales es el de la descontaminación del Choqueyapu.

Biólogos y expertos en hidrología desde el año 2015 alertaron a las autoridades sobre la inminente saturación del lago Titicaca, producto de la contaminación por causa del drenaje de los ríos altiplánicos que descargan sus aguas en el portentoso lago. Los municipios de El Alto, Viacha, Laja, Pucarinai, Batallas y Puerto Pérez, responsables del desastre, ejecutaron algunos trabajos de limpieza en el señalado año 2015, pero a poco mostraron pereza al respecto. Entonces se denunció que millones de bolsas plásticas, animales muertos y basura desembocaban en Cohana. Pobladores de la isla Suriqui, entre otros, se quejan de que la totora ha perdido sus cualidades por la contaminación, esto en perjuicio de las enormes y famosas balsas transatlánticas que fabricaban. Este es un ejemplo de que la fauna y flora del Titicaca está a punto de desaparecer, mientras el Gobierno Central y los municipio citados permanecen indiferentes.

Por su parte, el Illimani sufre una explotación minera irracional. Fuera de algunos informes tímidos el ministerio del ramo no se ha ido más allá. Cooperativas, lugareños y chinos explotan tranquilamente y sin responsabilidad la riqueza que atesora el nevado.

Para colmo la Asamblea Departamental el año 2017 no había consignado programa alguno para una adecuada protección. Inclusive dejó congeladas las denuncias y quejas de algunas comunidades sobre el tema. Llamamos la atención para que en la presente gestión la Asamblea Departamental consigne planes de preservación y los gestione debidamente.