Pronostican fuertes vientos en ciudad alteña

Se avecinan intensas corrientes de aire para la cuidad de El Alto, durante esta semana se presentarán los vientos más fuertes, según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), la velocidad de los ventarrones alcanzará hasta los 30 kilómetros por hora, por lo que se recomienda tomar precauciones y permanecer abrigado.

A diferencia de todo el resto del departamento, El Alto, esta semana, presenta la mayor cantidad de velocidad alcanzada por las corrientes de aire.

Desde la jornada de ayer ya se observaban varios anaqueles y toldos de puestos de comerciantes de la Ceja que luchaban por permanecer intactos ante el fuerte pasar de los vientos. Sin embargo muchas de las vendedoras tuvieron que reforzar sus toldos con piedras o cuerdas gruesas.

POLVAREDA Y LLUVIA

El fuerte ventarrón no sólo llevaba su fuerza sino que también mucho polvo y en algunos momentos gotas de lluvia.

Doña Jazmín, vendedora de pilas y otros artículos en cercanías al puente del arquitecto tuvo que amarrar una bolsa de nylon a sus alrededores para que el viento no pueda hacer caer los productos que expone para ganarse la vida.

Como ella, varios comerciantes tuvieron que buscar elementos pesados para poder utilizarlos a modo de cuña sobre los metales de diferentes lugares, algunos no encontraron nada simplemente se dispusieron a sujetar con sus propias manos el toldo que les cubría inicialmente de un sol intenso.

Los cambios de clima bruscos, no son la única característica de esta ciudad en esta temporada, la novedad de las variaciones climáticas también se presentan en la cantidad de humedad, que como pocas veces se pueden sentir en esta ciudad.

Los registros que se observan en las pantallas del Senamhi muestran una cantidad considerable de humedad llegando al 84 por ciento, sin embargo es relativa al porcentaje que se presentará en toda La Paz a diferencia de los vientos.

RÍO SECO

Desde el teleférico azul se puede sentir ligeramente el balanceo de las cabinas de transporte, hacia los lados, también se ve como mucha gente camina por las calles encorvados y acurrucados para evitar que el frío se apodere de ellos.

En las calles principales de esta zona, muchos carteles se encontraban prácticamente tirados en el piso.

Esto no sólo es un problema para quienes utilizan dichos artefactos para publicitar sus negocios sino que también es peligroso porque algunos metales puedan ser arrastrados por el viento provocando accidentes en las personas, vehículos que circulan en el lugar o niños que se encuentran desprotegidos por las calles.

PRECAUCIÓN

Debemos recordar que cuando se presentan este tipo de acontecimientos naturales en El Alto, las personas deben tomar sus precauciones con el fin de evitar quejas posteriores. El teleférico azul ya ha parado de forma inesperada en algunas ocasiones y, una vez, se detuvo más de una hora provocando malestar y susto en los usuarios de este servicio público.

Muchas personas tienden a no considerar los peligros que puede implicar el ponerse de pie debido a la necesidad de expresar sus quejas desde las cabinas. Sin embargo, antes de que ocurran dichas molestias es mejor que los alteños prevean el uso del servicio de transporte por cable, ya que esta semana habrá muchos ventarrones en toda la ciudad.

Por otro lado, las personas también deben portar algún protector en la vista, ya que los fuertes vientos no sólo llevan polvo sino también piedras minúsculas u otros elementos que pueden lastimar de forma peligrosa a los ojos.

Asimismo, algunos techos mal colocados en las estructuras de esta zona muestran claramente el movimiento de arriba abajo en algunas calaminas, lo que puede llegar a ser sumamente peligroso al ser arrancadas por el paso de fuertes corrientes.

BASURA

Más allá de las molestias que puede generar la magnitud del viento, las calles que no son muy concurridas muestran una evidente huella del paso de la basura que trasladan los ventarrones a diferentes calles y avenidas.

Varias bolsas de nylon rotas, papeles y hasta sobras de comidas recorren los asfaltos de los vecindarios sin que nadie pueda hacer nada.