Bolivia registra creciente y continuo déficit comercial

Desde el 2015, Bolivia registró una relación negativa con sus principales socios comerciales, es decir, que el valor de las exportaciones que percibe el erario nacional no cubre el costo de las importaciones y la cifra fue en aumento hasta el presente.

En ese año, la brecha alcanzó a 859 millones de dólares y en 2016, a 1.200 millones de dólares. La pasada gestión cerró con 1.300 millones, según dijo Gary Rodríguez, gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).

Bolivia se desplazó de contar con una balanza comercial superavitaria a otra deficitaria y una muestra de ello son las cifras registradas en los tres últimos años, que son negativas y van en aumento, cuyo impacto directo se advirtió en la disminución de las Reservas Internacionales Netas (RIN) del Banco Central y en un menor crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), sostuvo Rodríguez.

CIFRAS

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las exportaciones (ventas) bolivianas nuevamente se quedaron cortas frente a las importaciones, ya que en 2017 cerró con 7.985,5 millones de dólares, frente a las compras que alcanzaron a 9.287,8 millones de dólares.

Sin embargo, a pesar del déficit comercial registrado el 2017, el valor de las exportaciones presentó crecimiento en 10,5%, por los precios de los productos básicos frente a las cifras de 2016, así como las importaciones que acusaron un aumento de 9%.

Ante esta realidad que luce adversa, el gerente del IBCE recomendó que el país debe sustituir las importaciones de productos que la industria nacional tiene capacidad de procesar, como es el caso del Gas Licuado de Petróleo (GLP), que el país importaba en el pasado siendo ahora exportador.

ESCENARIOS

El año pasado, Bolivia importó de manera predominante bienes industriales intermedios y bienes de capital que conforman dos sectores altamente prioritarios para el sector productivo.

En ese ámbito, el presidente de la Asociación Nacional de Industriales Viticultores (ANIV), Franz Molina, observó recientemente –a modo de ejemplo–que la importación de bebidas se incrementó y los supermercados ofertan más que la producción nacional.

Esta situación se explica también por la propensión a mayores importaciones. China se ha constituido en los últimos años en el principal país proveedor de bienes en Bolivia y, con ello, creció también la deuda externa pública de 1.300 millones a 1.700 millones de dólares.

Rodríguez sugirió que se debería analizar la capacidad de producción que tiene la industria nacional en cuanto a algunos bienes que se importan y reducir su compra del exterior para potenciar al sector y atenuar el déficit comercial.

A pesar de los resultados registrados la pasada gestión, Rodríguez señaló que hay una recuperación de las exportaciones hacia el exterior, pero incidió que hay que trabajar para revertir la balanza comercial negativa.

MENOR DINAMISMO ECONÓMICO

El déficit comercial, registrado la pasada gestión, provocó un menor crecimiento del PIB, a ello se sumó la baja demanda estacional de volúmenes de gas de Brasil, donde incidieron los precios del petróleo en el mercado internacional.

Rodríguez dijo que en el segundo semestre de la gestión pasada hubo una recuperación de los precios del crudo y que la demanda de gas por parte de Brasil y Argentina también fue recuperándose.

Para esta situación argumentó que las adversas condiciones climáticas también influyó en la actividad económica, ya que la agricultura fue afectada por las lluvias y la sequía, la producción fue menor en caña de azúcar, y soya, entre otros rubros.

PRODUCTOS

De acuerdo con los datos del INE, los hidrocarburos, en especial, la venta de gas toma el liderazgo en las exportaciones con 32,9%, que representa 2.626,3 millones de dólares, seguido de la industria manufacturera con 32,5%, que en cifras significa 2.597,7 millones de dólares, y la extracción de minerales llegó a 28,2%, en cifras absolutas significa, 2.253,7 millones.