Delincuentes reinciden antes de ser procesados

El jefe de la División Propiedades de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Juan José Millán, afirmó ayer que antes de procesar a los delincuentes estos son detenidos al menos tres o cuatro veces por diferentes delitos que atentan contra la propiedad.

“En muchas ocasiones arrestamos al mismo antisocial tres no cuatro veces en un solo año tres. Considero que las autoridades judiciales están siendo muy benevolentes con este tipo de antisociales que ya tienen antecedentes delictivos que afectan de manera directa a la seguridad ciudadana”, explicó Millán.

En ese sentido, la autoridad policial refirió que una de las posibles causas para que suceda este fenómeno tiene que ver con el abandono de la causa por parte de los denunciantes debido a que son delincuentes reincidentes.

“La ausencia de las partes o el retiro de la denuncia cuando no quieren constituirse en denunciante por temor a represalias y ya no se apersonan al proceso, por ello los jueces deciden liberarlos”, expresó la autoridad policial.

CENTROS PENITENCIARIOS

Explicó que en los centros penitenciarios del país condicionan a los nuevos reclusos a aprender nuevas formas de vida que los obliga a una forma de sobrevivencia bajo el modo criminal.

“Cuando un nuevo prisionero llega a cualquier centro penitenciario del país los funcionarios le dicen ‘búscate la vida’ y de esa manera los aprehendidos que entraron por incumplimiento de asistencia familiar y delitos menores salen de la prisión expertos en robo, hurto, lanceros”.

Millán refirió la teoría del contagio criminal, fenómeno que sucede a través de la interacción, muchas veces de manera forzada con otros antisociales que tienen otro tipo de especialidades.

La Ley de Ejecución Penal y Supervisión del 20 de diciembre de 2001 establece que el régimen penitenciario nacional debería tener divisiones multidisciplinarias para albergar a los delincuentes, además de trabajos que permitan la reinserción de los privados de libertad.

“Es otra área escabrosa en Bolivia, en teoría tenemos un sistema penitenciario progresivo, pero en la práctica no es así. Las cárceles de nuestro país son centros de perfeccionamiento de la delincuencia porque juntan a todos los delincuentes en un mismo lugar y las condiciones de vida ahí son de sobrevivencia”, apuntó Millán.