Beirut.- Al menos siete personas murieron ayer por supuestos bombardeos de aviones rusos y disparos de artillería contra la zona de Termala, en el norte de Siria, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Entre los fallecidos hay un miembro de la Defensa Civil Siria, que presta labores de rescate en áreas fuera del control del Gobierno, un dirigente de la opositora Dirección de Sanidad de la vecina provincia de Hama y cinco combatientes de la facción rebelde Ejército de la Victoria.
Los ataques tuvieron como blanco una base de ese grupo insurgente en Termala, así como otras partes de la población, donde también cayeron cohetes de tipo tierra-tierra.
El Observatorio agregó que hubo bombardeos en otras áreas del sur de Idleb, como Al Tamanea y Al Juin, sin que se registraran víctimas.
Estos ataques coincidieron con la llegada hoy a la localidad de Al Sarmán, situada a 17 kilómetros de Al Tamanea y a 33, de Termala, de un convoy militar de las fuerzas de Turquía.
Casi toda la provincia de Idleb está en poder del Organismo de Liberación del Levante, la alianza de la exfilial siria de Al Qaeda, y de organizaciones rebeldes e islamistas.
Turquía desarrolla actualmente una ofensiva contra las milicias kurdosirias en el enclave de Afrín, en el norte de la provincia siria de Alepo, fronteriza con Idleb. (EFE)
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