Brasil retoma crecimiento y requiere más gas natural

El embajador de Brasil, Raymundo Santos Rocha, destacó como muy positiva la relación bilateral con Bolivia y auguró una mayor demanda de gas en función a las proyecciones de crecimiento de su país, que será 3% del Producto Interno Bruto (PIB) para el año, luego de cuatro años de recesión.

“Las relaciones entre Brasil y Bolivia están pasando por un momento muy positivo; el Presidente (Evo Morales) estuvo en Brasil el 5 de diciembre, y antes en octubre, ahí se habló de una cantidad de temas, incluso del tema del gas (…) pero no sólo es gas, sino también energía eléctrica”, afirmó el diplomático. La agenda bilateral incluye cuestiones de narcotráfico y seguridad.

Después de participar del saludo protocolar del cuerpo diplomático al presidente Evo Morales, la mañana de ayer, en el Palacio de Gobierno, el Embajador brasileño dijo que el Comité Bilateral Temático (CBT) trabaja en temas vinculados a las negociaciones del gas, tanto de YPFB con Petrobras, como con los sectores privados de varios Estados de Brasil, además de la posibilidad de comprar energía eléctrica.

HIDROELÉCTRICAS

Consultado si Brasil requiere comprar energía eléctrica, considerando su excedente hidroeléctrico, el diplomático dijo: “lo que está pasando en Bolivia es que en Brasil hay un periodo del año que llueve mucho y cuando llueve tanto las hidroeléctricas funcionan, pero cuando hay el periodo de la sequía bajan las hidroeléctricas y necesitamos de las termoeléctricas y ahí entra una grande demanda de gas”.

El diplomático destacó que las proyecciones de crecimiento de este año en Brasil es llegar al 3% de su Producto Interno Bruto (PIB), por lo que se prevé que demandará mayores volúmenes de gas. “Salimos de casi cuatro años de recesión y ahora estamos empezando a crecer y cuando crecemos  se requiere más energía”, afirmó.

Al respecto, el analista petrolero de Bolivia Carlos Miranda, en un comentario periodístico, expuso que el contrato de compra y venta de gas natural con Brasil no contempla las incidencias señaladas por el embajador Santos Rocha y que pretenderían justificar una menor demanda.

El contrato de compraventa entre Bolivia y Brasil establece un envío mínimo de gas de 24 millones de metros cúbicos día (Mmmcd) y un máximo de 30,08 Mmmcd, que incluyendo el combustible que se emplea para enviar el energético, el volumen llega a 31,05 Mmmcd, en promedio, aunque YPFB expresó su preocupación porque hubo meses en los cuales la demanda (nominaciones) bajaron incluso a 18 Mmmcd.

ACUERDO

En cumplimiento del contrato que no varía en cantidades durante el año, Bolivia se ve obligada, por la cláusula de “deliver or pay”, a enviar como mínimo 24 Mmmcd, y si no cumple se somete a multas, (entregar el volumen contratado o pagar por el mismo). Pero también Brasil por la aplicación del “take or pay” (pague lo contratado), por lo que el país comprador está obligado a pagar por el mínimo establecido de exportación, aunque no haya utilizado el producto.

En cuanto a las reservas hidrocarburíferas, el ministro de Hidrocarburos, Luis Sánchez, afirmó que la certificación de reservas de gas nunca fue una condición para que Bolivia firme sus contratos de compraventa con Argentina y Brasil.

Garantizó el abastecimiento normal de los mercados vecinos y del interno. Sin embargo, anticipó que es muy probable que en los próximos días se informe del descubrimiento de nuevos reservorios de gas. 

INTERPRETACIÓN

En respuesta a las declaraciones del embajador argentino, Normando Álvarez, quien dijo que Argentina está dispuesta a comprar más gas, pero necesita certeza, el titular de Hidrocarburos expresó: “lo que dice el Embajador de Argentina es nosotros queremos más gas, y estamos trabajando en eso, pero jamás el Embajador ha preguntado que para darme gas cuánta reserva tienen”.

Sánchez dijo que los países que firmaron con Bolivia, como Argentina y Brasil para la compra de gas, y Paraguay para el GLP, jamás pidieron la certificación de las reservas, que en el caso del país se hizo por última vez el 2013.

“Las reservas que nos han entregado eran de 27,7 trillones de pies cúbicos (TCF) -la gran mentira- eran 9,9 TCF; el 2013 hemos certificado 10,45 TCF, el factor de reposición anual ha sido de 1,2 TCF y eso es bueno porque hemos repuesto lo que hemos consumido y hemos incrementado”, indicó.