Defensa de Sánchez de Lozada apunta a Morales y Quispe

Durante el segundo día del desarrollo de juicio civil en Fort Lauderdale, a 50 kilómetros de Miami (EEUU), la defensa de los exgobernantes Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berzaín afirmaron que las muertes en las protestas de 2003 durante la revuelta son atribuibles a Evo Morales y al dirigente campesino Felipe Quispe.

La abogada Ana Reyes aseveró que “no hubo un plan (del Gobierno de Sánchez de Lozada) para matar gente” y que los responsables de estos “trágicos” hechos son Morales, líder por entonces del sindicato de cocaleros, y Quispe, dirigente aymara y antiguo miembro de un grupo indigenista armado.

Explicó, además, que durante las protestas existía crisis en Bolivia. “Había bloqueos de vías y puentes, la muerte de tres uniformados, emboscadas, escasez de suministros, comida y combustible y amenazas de saqueos”, dijo.

El pasado lunes comenzó el proceso con la selección del jurado en el juicio instaurado por familiares de víctimas contra exautoridades que serán juzgadas por la muerte de 50 personas.

Según publicó la agencia de noticias ANF, el documento, resumen del proceso, establece que la clave de las audiencias será demostrar si en los sucesos de octubre hubo “intencionalidad” de matar de parte de los acusados.

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