• Carlos Alarcón: Actitud del Gobierno boliviano no ayuda en la imagen de nuestro país a días de la defensa de los alegatos orales en la Corte de La Haya
La acción del régimen comunista cubano, liderado por Raúl Castro, que retuvo y deportó a los expresidentes de Bolivia, Jorge Quiroga, y de Colombia, Andrés Pastrana, además de la postura del presidente Evo Morales que apoyó a su aliado político y arremetió contra los exmandatarios, desembocó en un enfrentamiento mediático entre el exmandatario colombiano y el dignatario de nuestro país. Pastrana relacionó a Morales con el narcotráfico.
EN EL TWITTER
Evo Morales, después de que el miércoles fueran deportados Quiroga y Pastrana de Cuba, a través de su cuenta en Twitter arremetió contra ambos y los relacionó con el Plan Cóndor y Plan Colombia, respectivamente.
“Nostálgicos del Plan Cóndor y Plan Colombia, Tuto Quiroga y Andrés Pastrana, nos insultan porque su plan de provocación a la República de Cuba fracasó con su deportación. Los que vendieron la soberanía y dignidad de Bolivia y Colombia a injerencia de EEUU no merecen ningún premio”, escribió el mandatario boliviano.
La respuesta no se dejó esperar por parte del expresidente de Colombia, Andrés Pastrana, quien arremetió contra Morales y lo vinculó con actividades del narcotráfico.
Pastrana no se quedó callado y, a través de otro trino, arremetió contra el Presidente boliviano, a quien acusó de alentar y proteger al narcotráfico. Además, recordó los resultados del referéndum constitucional del 21 de febrero de 2016 que rechazan la repostulación de Morales a la Presidencia.
“Plan Colombia salvó a Colombia de las garras del narcotráfico, ese que usted produce, alienta y protege hace décadas, ese que alimenta cárteles como el de mi secuestrador Pablo Escobar y a sus amigos de las Farc. 2016 Bolivia dijo NO a su reelección, Colombia dijo No a las Farc”.
DISTINTAS REACCIONES
La deportación de los expresidentes Jorge Quiroga y Andrés Pastrana de Cuba, por parte del gobierno de Raúl Castro, ha provocado diferentes reacciones en los gobiernos de Bolivia y Colombia.
Mientras el presidente Evo Morales calificó de golpistas a los exjefes de Estado, el Gobierno colombiano lamentó la decisión adoptada por la administración de la isla.
El Ministerio de Exteriores de Colombia lamentó “este tipo de incidentes a colombianos que han sido amigos de países cercanos” y ha asegurado que se ha puesto ya en contacto con el Gobierno cubano para abordar la situación, según se informó desde la Cancillería.
Asimismo, varios expresidentes rechazaron y condenaron la acción del régimen cubano, en tanto Morales calificó a ambos exmandatarios de “agentes golpistas de Trump”.
“Condenamos el acto de provocación impertinente e injerencia temeraria de los expresidentes Tuto Quiroga y Andrés Pastrana, que intentaban ingresar arteramente al país soberano de Cuba. Los agentes golpistas de Trump nunca serán bien recibidos en países libres del imperialismo”, publicó el presidente Morales, desde su cuenta en Twitter.
Pastrana y Quiroga habían llegado a La Habana para recoger el Premio Payá, que debió ser entregado ayer por la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia.
Quiroga y Pastrana tenían la intención de recoger dicho galardón en nombre de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), que integran varios expresidentes de la región y los españoles José María Aznar y Felipe González. El boliviano ha demandado “garantías” para Rosa María Payá, líder de la Red.
El Gobierno de Castro informó que la Embajada de Cuba en Colombia informó que, “desde el día de ayer, el expresidente Pastrana fue advertido sobre que no se le permitiría el ingreso a Cuba debido a la actividad que iba a realizar en la isla”.
IMAGEN DE BOLIVIA
A 10 días de que el equipo jurídico exponga los alegatos de la demanda marítima ante los jueces de La Haya, en Bolivia persiste un clima de confrontación política interna, hecho que repercute en el ámbito internacional, donde la actitud del presidente Evo Morales no ayuda en nada a la imagen de Bolivia, según el análisis de Carlos Alarcón.
“La imagen que estamos generando hacia fuera del país es preocupante, porque los efectos serán después del fallo que se vaya a dar, porque Chile tendría que cumplir su compromiso; pero el primero en tener que cumplir su compromiso es el Presidente de Bolivia ante el robo que está haciendo de nuestra soberanía”, manifestó Carlos Alarcón, constitucionalista.
Mencionó que la visión que está emanando el mandatario a nivel internacional no está bien, porque se está suscitando un ambiente interno que connota ciertas actitudes que no van a ayudar para después del fallo.
“Entonces esa imagen internacional que está proyectando el Presidente, justamente a las negociaciones que vendrán después del fallo favorable a nosotros, esté totalmente equivocada porque quiere separar el 21F con la demanda marítima en la Corte Internacional de Justicia (CIJ)”, sostuvo.
“En sí lo que está pasando es que la conducta del Presidente en nuestro país, al no respetar el 21F y querer separarlo (de) la demanda marítima, está dejando de lado sus obligaciones como mandatario de Bolivia”, dijo.
“Cómo vamos a exigir a Chile que cumpla sus obligaciones, si el presidente Morales no quiere cumplir sus propios compromisos con su propio pueblo, a quien le está robando y usurpando su soberanía expresada en un referéndum”, afirmó.
Las diferencias que se están dando entre los expresidentes y el presidente Evo Morales no debería perjudicar el asistir a ese evento histórico, considera el constitucionalista.
“Los líderes de la oposición deberían viajar todos y apoyar este hecho histórico, pero deberían dejar claramente sentado que si el Presidente en vez de ser el primer actor, promotor de un fallo en La Haya e insiste en no respetar el voto de los bolivianos en 2016 y 2009 (…) en lugar de ser el héroe, se va a convertir en el elemento más perjudicial de Bolivia”, indicó.
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