La capacidad productiva del departamento de Santa Cruz, principal proveedor de alimentos del país, fue mermada por el impacto de fenómenos climáticos hasta alcanzar pérdidas que rondan los 120 millones de dólares.
La información fue dada a conocer por la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), los que confirmaron la destrucción de sus cosechas y se quejan de que nadie les haya apoyado económicamente ante las inundaciones y las sequías.
En un viaje a las regiones productoras cruceñas, organizado por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), el presidente de Anapo, Marcelo Pantoja, reconoció el grave impacto de fenómenos como La Niña con inundaciones en el norte, o la intensa sequía en la parte este de Santa Cruz.