La triste historia anual de inundaciones

Sugerimos a las autoridades gubernamentales y entidades técnicas la elaboración de un Plan de obras hidráulicas para que no se repita la triste historia anual de inundaciones. Son necesarias obras de ingeniería para el manejo integral de cuencas hidrográficas, con la construcción de presas de almacenamiento y control de inundaciones, aprovechando las características topográficas de Bolivia, como los ríos caudalosos localizados a 5.000 metros de altura, que discurren por quebradas, valles y llanos, cuyas alturas varían de 3.000 a 4.000 metros sobre el nivel del mar.

Por la cuenca del río Beni discurren, como promedio anual, 89.200 millones de metros cúbicos de agua. Un ramal de la cuenca del río Beni se origina en las alturas de la cordillera La Paz, cerca de Achocalla. Allí se puede construir presas hidroeléctricas y vasos de almacenamiento para el control de inundaciones a lo largo de los ríos La Paz y Bopi, río Alto Beni, que se une con el río Kaka, formado por los ríos Tipuani y Mapiri, que se originan en la Cordillera de Muñecas junto al río San Cristóbal.

La ejecución de estas obras hidráulicas está supeditada a la construcción de vasos de almacenamiento de agua, complementados con distintos tipos de presas para el control de inundaciones, generación de energía hidroeléctrica, regulación de caudales en la época de sequía, con el objetivo de atender demandas de sectores industrial, agrícola, ganadero y para disponibilidad de agua potable.

Bajo esta premisa, Bolivia puede solucionar graves problemas económicos y sociales causados por las inundaciones en los departamentos de La Paz, Beni, Cochabamba, Santa Cruz y Pando.

Con las recomendaciones sugeridas se podrá evitar la repetición anual de la triste historia de inundaciones en el Beni, porque el gobierno solo se atiene a prestar ayuda a los pueblos en la época de inundaciones, sin mantener en forma permanente la ayuda y el control climatológico e hidrológico de áreas inundables.

Pasando al tema de proyectos técnicos económicos y jurídicos que están pendientes de solución por parte de la Cancillería, son los siguientes:

Desvío ilegal del río Mauri por parte del gobierno del Perú para favorecer el desarrollo económico en la provincia Peruana de “Majes”, conociendo que se trata de un río internacional de curso sucesivo que nace en territorio peruano e ingresa a Bolivia para incrementar el caudal del río Desaguadero y mantener el nivel de aguas en el lago Poopó. Otro proyecto pendiente de solución se refiere al uso de las aguas del río Madera, que nace en territorio boliviano y que al pasar la frontera se denomina río Madeira, donde la República Federal de Brasil ha construido las presas hidroeléctricas de Jiraú y San Antonio, que generan un potencial de 3.000 a 4.000 mega watts. Según normas y leyes internacionales, el Gobierno del Brasil debería pagar por el uso de aguas que nacen en el Estado de aguas arriba y entregar el 50% del potencial de energía hidroeléctrica generada.

Estas obras fueron ejecutadas cuando era presidente del Brasil el señor Luis Inácio Lula Da Silva, invirtiendo millones de dólares de fondos nacionales y contraviniendo las disposiciones de entidades técnicas nacionales para cumplir con la exigencia de contar con la licencia referida al impacto ambiental.

Analizando el problema de inundaciones en el Beni y tomando como referencia los datos proporcionados por el ingeniero Pinto Parada, podemos adelantar que es posible resolver el problema de inundaciones del oriente investigando y analizando el comportamiento de los sedimentos transportados por los ríos Beni y Mamoré. Es necesario tomar en cuenta que el lecho de los ríos se viene colmatando anualmente, cuando disminuye la velocidad del agua en los llanos orientales, donde se forman albardones de arena que obligan al agua a buscar distintas direcciones, de manera que toman la pendiente natural del terreno.

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