A siete años del megadeslizamiento

II

Tipo de terreno: Como se puede observar en la zona de Kupini II, el suelo no presenta pedrones (no es un conglomerado), en consecuencia el suelo y subsuelo son deleznables (flojos).

Peso de las construcciones: Como se puede observar cerca del farallón (barranco) formado por el deslizamiento, en la parte alta (Pampahasi Central-Bajo), existen construcciones de varios pisos cerca del borde, que sin duda con su peso coadyuvaron a que el suelo cediera. Después del año 2011 se siguieron realizando construcciones cerca de la corona (Pampahasi Central-Bajo). Se debería prohibir la construcción de nuevas casas siquiera a los 100 metros del barranco de Pampahasi (corona).

Aguas subterráneas: En la reunión barrial del 2 de marzo de 2011, en Pampahasi, se indicó que a partir de las calles 14 de Pampahasi, del farallón producto del deslizamiento salen aguas subterráneas. ¿Los vecinos se preguntaron de dónde sale esta agua? Tratando de encontrar respuestas, culparon a las fugas de las cañerías, así como a la infiltración del agua desde la superficie del suelo hacia el subsuelo, en época de lluvias.

Topografía y pozos ciegos: De Pampahasi hasta Kupini II existía una pendiente pronunciada de 70 grados con la horizontal, donde se veía la presencia de casas, hasta de pisos. ¿Existirían también allí pozos ciegos que remojaron el subsuelo?

Época de lluvias: Las lluvias saturaron el suelo y subsuelo desde Kupini II hasta el río Irpavi.

Soluciones:

Era prioritaria la canalización del río Chullunkani, lo cual ya se hizo. Para esto se buscó el financiamiento adecuado, el cual se dice que tenía que ser de 3 millones de dólares. Algunos vecinos señalaron que de nada les sirve tener calles asfaltadas, árboles, jardineras y otros si ya no tienen sus casas. Algunos medios de comunicación informaron que la pérdida total estimada debido al megadeslizamiento fue de 50 millones de dólares (más bien que no hubo pérdidas humanas), esto lo debemos comparar con el precio de la canalización del río Chullunkani (3 millones de dólares), “relación costo beneficio”.

Una vez que pasó la época de lluvias y se detuvo notablemente la velocidad del deslizamiento, se prosiguió con el terraceo de las zonas de Kupini II y Callapa (sector deslizado), una labor excelente (cambio de geometría), que detuvo los deslizamientos.

Con el “mapa de grietas” se realizó un seguimiento para ver si el megadeslizamiento va en descenso o aumento.

No se debe sobrecargar las zonas comprometidas, con construcciones de varios pisos (mejor si las construcciones solo tienen un piso). Se debe prohibir la construcción de nuevas casas siquiera a 100 metros del barranco de Pampahasi Central-Bajo (corona).

Se debe realizar un control adecuado para evitar el tránsito especialmente de vehículos pesados en siquiera 3 cuadras aledañas al farallón de Pampahasi. Actualmente camiones de alto tonelaje descienden desde la Cancha Venus hasta el Valle de Las Flores por la prolongación 23 de Marzo.

Hasta hace 15 años, en la parte alta del río Chullunkani existían “galerías filtrantes” para lograr extraer del subsuelo las aguas subterráneas hacia la superficie. En consecuencia, tanto en el mismo lugar (parte alta) como en otras se construyó más “galerías filtrantes”, lo cual fue muy bueno.

Un acontecimiento muy especial fue que de un cementerio próximo al deslizamiento, una parte se vino abajo. La Alcaldía debe dar más facilidades para que la población de bajos recursos pueda enterrar a sus difuntos en el “Cementerio General de la ciudad de La Paz”.

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