Deforestación genera islas de calor en Cochabamba

La deforestación registrada en los últimos días ha provocado la protesta de ciudadanos que reclaman por áreas verdes en la capital cochabambina. De acuerdo con los expertos, la pérdida de espacios urbanos arborizados repercute en la formación de islas de calor y la sensación de temperaturas más altas.

El investigador de la Universidad Católica, Marcos Luján, dijo que “los árboles tienen el efecto de regular la humedad en la atmósfera y también la temperatura, la sombra que hacen los árboles reduce el efecto de las islas de calor en la ciudad, si no tenemos árboles el efecto es más pronunciado”, acotó.

Según una publicación de Los Tiempos, las ‘islas de calor’ son espacios secos sin sombra y escasa humedad que acumulan calor por la falta de vegetación. Al respecto, Luján explicó que la temperatura en una zona urbana en la que hay demasiada masa térmica y pocos árboles puede alcanzar una variación de 7 grados en relación a la periferia, cuando lo “normal” es entre 3 a 5.

Según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) el viernes pasado se registró una temperatura promedio de 32,7 grados.

Cabe recordar que la semana anterior la construcción del corredor Quintanilla provocó la caída de dos árboles, además, previamente, varios árboles fueron podados y se extrajeron tres álamos para el colocado de las graderías para el Corso de Corsos en la avenida Ramón Rivero.

Asimismo, el experto dijo que “el tema de la isla de calor depende mucho de la masa térmica, la densidad de edificios que acumulan calor, de la estructura de la calle, a la orientación, el espaciamiento y una serie de variables”, explica el experto.

El Diagnóstico del Plan Municipal de Forestación sostiene que el 42,94 por ciento de la cuidad se compone de “suelo artificial”. Este suelo artificial está compuesto de áreas impermeabilizadas por construcciones y pavimento que impiden la absorción del agua y la mitigación de la acumulación de calor.

Entretanto, la experta forestal Sarah Jiménez explicó que la cantidad de infraestructuras de cemento intensifican la condición de valle seco que tiene Cochabamba. “Al quitar los árboles quitamos los beneficios de sombra de humedad de descontaminación”, manifestó.