Reeditaron “Acción por la Dignidad del Niño Trabajador”

Este Jueves Santo, la fundación Arco Iris reeditó la “Acción por la Dignidad del Niño Trabajador”, para que por unos minutos, las personalidades se pongan en el lugar de los niños lustrabotas, recordando además el acto de humildad de Jesucristo que lavó los pies de sus discípulos.

Como todos los años, personalidades de la Iglesia Católica, representantes políticos, presentadores de televisión, participaron de este acto que se realizó en la plaza de San Francisco. En esta oportunidad participaron del evento el alcalde Luis Revilla, Mari Cruz Rivera, el defensor del Pueblo Waldo Albarracín, el comediante David Santalla, entre otras personalidades paceñas.

La iniciativa se forjó en 1994, y desde esa oportunidad la actividad estuvo destinada contra la discriminación, marginación y falta de oportunidades que sufren miles de niños, niñas y jóvenes: abandono, violencia intrafamiliar, maltratos, violaciones, orfandad, en algunos casos cuyos padres están en la cárcel y los que viven o trabajan en las calles de la ciudad de La Paz.

“Desde hace 18 años que realizamos este acto simbólico de rememorar la actitud de Jesucristo al lavar los pies a sus discípulos. Hoy nos toca a nosotros hacer lo mismo. Queremos también dignificar el trabajo de los niños y buscar mejoras en la sociedad”, dijo el director ejecutivo de la fundación Arco Iris, Jorge Toledo.

En recompensa, los niños entregaron una  cajita de lustrabotas a sus respectivos “lustras”. 

FUNDACIÓN

El Proyecto Trabajadores de la Fundación Arco Iris brinda atención a niños, niñas y adolescentes trabajadores que desempeñan funciones como: lustrado de zapatos, vendedores ambulantes, limpia vidrios, cargadores en los mercados, voceadores de buses de transporte público y otros.

El padre José Neuenhofer creó la Fundación Arco Iris en 1994 como un proyecto solidario, inicialmente compuesto por dos hogares para infantes y adolescentes desprotegidos.

Después de 23 años esta labor creció y se ha ido estructurando de forma preventiva, conforme avanza la problemática de las personas vulnerables, con el propósito de brindar una mejor vida y futuro a los beneficiarios.

Entre otros, se ocupa de dos centros de acogida para menores huérfanos o cuyos padres están privados de libertad; una para niños (Casa Esperanza) y otras para niñas (Hogar Obrajes).

Además es responsable de tres Centros Integrales (Betania, Periférica y Casa de Paso) que tienen guardería y brindan apoyo escolar, actividades recreacionales, deportes, salud, acogimiento familiar y alimentación nutritiva; ofreciendo protección y desarrollo óptimo, al mismo tiempo, de transmitirles valores a los pequeños que viven en extrema pobreza o que sus padres trabajan o duermen en la calle.

Finalmente, la Fundación cuenta con el Hospital Arco Iris, creado con el propósito de resolver el problema de atención médica para niños y niñas que están bajo su protección y de personas que viven en extrema pobreza, además de toda la población.