Rosita Ríos se despide con obra basada en su vida

La reconocida actriz Rosita Ríos, que interpretó durante 45 años innumerables papeles, alista una despedida oficial de los escenarios, con una obra teatral, en la relatará parte de su vida y su incursión al teatro. Lo hará vestida de pollera.

"Todas mis obras las hice vestida de pollera, a excepción de una, pero ahora quiero terminar mi carrera vestida también de pollera", declaró en entrevista con EL DIARIO.

La principal protagonista de "Me avergüenzan tus polleras", "El calvario de mi madre", entre otros, pondrá el punto final a su pasión como es el teatro, desde donde tocó muchos corazones con sus actuaciones.

En la tienda ubicada en la calle Jaén, de la ciudad de La Paz, donde a diario atiende a sus clientes del vecindario, la actriz dijo al Decano de la Prensa Nacional que para su despedida espera trabajar con gente de teatro de su tiempo, como Rodolfo Calahumana, Raúl Villarroel y el famoso Pezón, entre otros.

Si bien el nombre de la obra no tiene aún título ni lugar de presentación, se espera que esté en escenario en octubre de la presente gestión.

A sus 83 años, Ríos mantiene su espíritu juvenil y bondadoso. Mientras atiende en su tienda, muchas personas que la reconocen aprovechan la oportunidad para saludarla y ella responde derrochando alegría.

Es madre y padre de tres hijos (una mujer y dos varones) de quienes se siente orgullosa, también es jubilada de la Policía como Subteniente, pero sobre todo, es una persona agradecida primero con Dios, por darle la vida y el talento, y luego con quienes le dieron la oportunidad de incursionar en el teatro.

"El señor Raúl Salmón fue quien me dio la oportunidad (...). Yo no salí de ninguna universidad, todo lo aprendía gracias a Raúl Salmón", añadió.

SALA DE EXPOSICIÓN

La actriz tiene en mente lograr un espacio para exponer las innumerables indumentarias de los personajes que interpretó a lo largo de su trayectoria, como también para mostrar los accesorios de recuerdos que tiene.

"Voy a ver si lo dono o lo expongo. Tengo muchos accesorios y vestimenta, como por ejemplo de la Tía Nuñez, del Pepino y de tantos otros personajes que me disfracé", sostuvo.

Ríos cree firmemente que para hacer teatro no se necesita fingir, sino vivir.

"Me di cuenta que para hacer teatro uno tiene que vivir el papel. Si soy madre tengo que ponerme en el rol de una madre. No puedo fingir", finalizó.