Folklore ecuatoriano inspira exposición

“Yo quiero que a mí me entierren, como a mis antepasados, en el vientre oscuro y fresco de una vasija de barro” dice la primera estrofa de la canción “Vasija de barro”, considerada un himno del folklore ecuatoriano. La pieza musical, que tiene más de medio siglo, inspiró a la artista nacional, Jacqueline Mamani Pacajes, para elaborar más de 15 obras en cerámica.

La muestra puede verse actualmente en la sala Arturo Borda (1er piso de la Casa de la Cultura) y permanecerá abierta hasta el miércoles 18 de abril.

“La exposición está inspirada en la canción ‘Vasija de barro’, que habla sobre la vida después de la muerte, la continuidad de una persona tras haber cumplido esta etapa de la vida. Asimismo, incluye iconos de nuestros antepasados y también los cuatro elementos: el agua, tierra, fuego y aire”, manifestó la artista.

Las obras, que miden entre 35 y 40 centímetros reflejan ritualidades andinas y su simbología, el núcleo de la familia, la reciprocidad, la chakana como puente hacia el cielo y la morada, después de la muerte y la reencarnación.

Modelado de filigrana, modelado en arcilla y engobe fueron algunas de las técnicas empleadas por la artista para la elaboración de las obras.

Mamani se formó artísticamente en la Academia Nacional de Bellas Artes “Hernando Siles” y la carrera de Artes de la Universidad Mayor de San Andrés. Ha realizado distintas exposiciones colectivas en diferentes salas y galerías en La Paz y también a nivel nacional.

Durante su carrera se hizo acreedora a distintos reconocimientos como el segundo lugar en la especialidad de cerámica en el Salón Anual de la carrera de Artes de la UMSA (2013), mención de Honor en el Salón de Artes Pedro Domingo Murillo (2014), y el primer lugar en cerámica en el Salón UMSA 50 años - carrera de Artes y Diseño (2015).

En el año 2014 logró el primer lugar en el Concurso Municipal “Forjando Identidades” en la categoría de cerámica, en 2015 ganó el premio principal del concurso Suma Lurata y en 2016 obtuvo el segundo lugar en el Premio Plurinacional Eduardo Abaroa.