La utilización de la metodología fracking en Bolivia para obtener gas natural y petróleo asestará un grave impacto a la salud humana y al medio ambiente, según expertos, ya que esta técnica inyecta fluidos a gran profundidad de la superficie terrestre para provocar la fractura de los reservorios.
Asimismo, los estudios dan cuenta que el flujo que se obtiene después de la fractura contiene mercurio y materiales radiactivos procedentes del yacimiento, lo que contamina acuíferos y el medio ambiente.