Nicaragua cumplió ayer su tercer día consecutivo de protestas cívicas por las reformas al Seguro Social con todas las escuelas cerradas, tras una larga noche de movilizaciones y enfrentamientos que dejaron al menos tres muertos.
Según publicación de EFE, las diferentes manifestaciones de Managua y León, cada vez más numerosas y multitudinarias, provocaron un efecto contagio en diversas ciudades del país centroamericano como Masaya, Granada o Estelí y se saldaron con la muerte de tres personas y con al menos 33 heridos contados por la Cruz Roja, mientras el Gobierno calla.