Luiz Inácio Lula da Silva, encarcelado por corrupción desde el 7 de abril, dio luz verde al Partido de los Trabajadores (PT) para que evalúe si mantiene su candidatura a las elecciones presidenciales de octubre en Brasil, aunque la formación cierra filas en torno a él.
“Quería que ustedes se sientan totalmente libres para tomar cualquier decisión porque 2018 es muy importante para el PT, para la izquierda, para la democracia. Y, para mí, quiero mi libertad”, escribió el exmandatario en una carta que la presidenta del partido, Gleisi Hoffmann, leyó la noche del lunes en una reunión del directorio nacional de la organización política.