Mi cuerpo está sano y en perfectas condiciones

Nuestros pensamientos crean nuestra realidad y podemos ir probando esta afirmación poco a poco, al comienzo, tan solo escribiendo un pensamiento de forma repetitiva por varios días hasta lograr que la evocación o acto de recordar ese pensamiento se convierta en un hábito mental automático.

El estado actual de nuestro cuerpo es el resultado de nuestra manera de pensar, de sentir, de creer y de obrar; aprendiendo a ordenar nuestra manera de pensar podemos probar y comprobar la afirmación que dice: “Creamos nuestra realidad con los pensamientos a lo largo de nuestros días de vida”. Nada se pierde al tomar la decisión de escribir un modelo mental positivo por una o dos semanas de nuestra vida.

Así que ya lo sabes, puedes tomar la afirmación contenida en el título del presente artículo (mi cuerpo está sano y en perfectas condiciones) y proceder a escribir dicha afirmación. Luego de perseverar por dos o tres semanas constatar los cambios y las mejoras logradas en tu funcionamiento mental, corporal, físico y relacional.

Hace unos meses me dio un resfrío “terrible” y me quedó una tos muy rebelde que sanaba muy lentamente; utilizando la afirmación: “mis pulmones están sanos, perfectos y rosaditos” más la proyección de energía vital lila hacia mi pecho, la tos que era sin duda de carácter sicosomático desapareció por completo.

Las afirmaciones positivas son muy potentes en su campo de acción y tienen sus beneficios colaterales: nos enseñan disciplina, nos enseñan ortografía, nos enseñan a tener un poco de fe y, finalmente, nos muestran que tenemos poder en las palabras que elegimos para vivir y para resolver los problemas de la vida con acciones simples y disciplinadas.