Matemáticamente...

Matemáticamente, el adverbio más popular dentro el ámbito futbolero que pregona el dirigente, entrenador, jugador y comentarista deportivo cuando toda expectativa de clasificar a Mundiales, Copas Libertadores y Sudamericana , ilusiona a algunos hinchas del fútbol cuando la chance ya no existe. Recordemos que desde la clasificación al mundial de Estados Unidos de 1994, participamos en seis eliminatorias hasta la fecha, ocupando generalmente el penúltimo y último puesto de la tabla de posiciones. Sin embargo cuando ya se habían disputado la primera vuelta con partidos jugados en casa como de visitante y la segunda rueda en un 50%, surgían voces desde los programas deportivos en las pantallas de televisión, señalando que matemáticamente aún teníamos posibilidades de acceder a una clasificación si el equipo A perdía como dueño de casa con el equipo Z y nosotros ganamos de visitantes al equipo B que nos ganó en nuestro terreno y el equipo C empataba con el equipo D. Todo un crucigrama para hacernos creer que aún teníamos chance. Creemos que al ser transmitidos los partidos por televisión, el hincha ya tiene un criterio propio sobre el desarrollo de un partido. El esquema de juego, capacidad y estrategia de cada equipo. La actuación del árbitro. La figura del partido y que ningún comentarista deportivo le puede meter los dedos a la boca con un criterio personal e interesado, porque matemáticamente por la capacidad de nuestros jugadores con relación a los demás simplemente de Sudamérica, no nos alcanza. Este razonamiento se demuestra de manera totalmente clara, con la calidad de los partidos que juegan nuestra Selección y equipos de visitantes con planteamientos mezquinos con un solo delantero que desluce el espectáculo, constituyéndose estos encuentros en los peores de estos certámenes, si vemos los demás encuentros donde ningún equipo visitante da tregua y que de un solo contraataque con varios jugadores, definen los partidos como profesionales que son y “cancheros” en estas lides. Lo sucedido con nuestros equipos en las Copas Libertadores y Sudamericana, demuestran al desnudo que la preparación física y técnica de nuestros jugadores están a muy larga distancia de los integrantes de los equipos participantes en estas justas, de ahí que querer resolver el crucigrama sobre las posibilidades de nuestros equipos invocando que matemáticamente podemos clasificar, ya tiene cansada a la hinchada, y este comentario hace que muchos televidentes cambien de canal o apaguen el televisor, por las desubicadas apreciaciones que efectúan todos los actores del fútbol, coadyuvados por los comentaristas deportivos que alimentan estas posibilidades, sin considerar la capacidad de los jugadores del exterior, cuyo profesionalismo va aparejado con las estructuras deportivas con las que cuentan. En conclusión, si MATEMATICAMENTE con el crucigrama que se especula desde los medios de comunicación en los programas deportivos se hubiesen conseguido clasificaciones, creo que la preparación de nuestros equipos es excelente y que les eviten mayores fatigas a los jugadores para que no desvanezcan por el sobre entrenamiento al que son sometidos sin piedad.

Dr. Edgar Linares Mariscal,

fundador y ex asesor legal de Fabol