Cinco sindicatos de transporte trabajan sin control de tarifas

Choferes que ofrecen transporte a viajeros recién llegados controlan las tres puertas de ingreso y salida del Aeropuerto Internacional de El Alto, a 10 meses de que EL DIARIO evidenció el monopolio del servicio de por parte de los sindicatos Rafael Pabón, Aeropuerto 78, Andino, 29 de Mayo y el único sindicato de minibuses Cotranstur, el reclamo por tarifas sin regulación continúa generando molestias en la población.

Si bien en el día y parte de la tarde los sindicatos mencionados “respetan”, las tarifas acordadas con Sabsa, la misma se publica en un letrero casi oculto en la última puerta no habilitada para el ingreso ni salida de usuarios del aeropuerto internacional, por lo general, el cobro de las mismas es a “ojo del pecador”.

PRECIOS ARBITRARIOS

Tania Vizcarra que llegó de Argentina confirmó que en el Aeropuerto de El Alto no existe la posibilidad de conseguir otra alternativa de transporte, porque en las puertas de ingreso y salida, solo se evidencia las 25 unidades móviles de los sindicatos que realizan este servicio.

“Al parecer solo ellos prestan servicio, incluidos los minibuses blancos, pero uno tienen que tener suerte para llegar a un horario adecuado, para que el costo de pasaje no llegue a variar mucho, ahora me cobraron Bs 80 hasta el centro de La Paz, Pérez Velasco, pero cuando debo retornar y estar en la madrugada en el Aeropuerto, porque el vuelo es muy temprano, debo cancelar hasta Bs 120 y no sé por qué a que se debe el cambio de precio, si el tramo es el mismo, eso es lo que me parece un abuso”, explicó.

SIN ALTERNATIVA

Como Vizcarra, diariamente cientos de pasajeros, al salir del aeropuerto inmediatamente son rodeados, no solo por los conductores de los móviles, sino incluso por los controles, quienes con chaleco o saco azul, “encaminan” a las personas que salen del predio, directo a estos móviles, sin que el usuario pueda tener una segunda opción, como evidenció EL DIARIO.

Pero al no ser suficiente la hilera de unidades móviles de los radiotaxis que se instalan en todas las puertas de ingreso y salida al Aeropuerto Internacional, al frente de la principal puerta se instala la parada del único sindicato de minibuses Cotranstur, tarifa que si bien mantienen sus costos de Bs 3.80 de La Paz al Aeropuerto y Bs 1,50 a la Ceja de El Alto, dicho servicio no suele aparecer en horarios altos, como después de las 22.00 horas o en la madrugada, favoreciendo de esta manera solo a los cuatro sindicatos de radiotaxis.

NO AUTORIZADOS

Entre medio de motorizados parqueados en el playón del Aeropuerto Internacional de El Alto, de forma “clandestina” conductores de taxis o de otros radiotaxis ofrecen discretamente sus servicios, con la finalidad de poder acceder al derecho laboral.

“¿No quiere el servicio, solo a Bs 30 o 25, hasta la Pérez no desea?”, es uno de los ofrecimientos de un móvil, mientras otro conductor prefiere hacer señas desde su ventana para poder captar a algún pasajero, porque es consciente de que no puede ingresar a la fila de los móviles estacionados, únicos que prestan la asistencia suscrita por concesión de Servicios de Aeropuertos Bolivianos S.A. (Sabsa)

En cuanto a las tarifas de los sindicatos, estas oscilas de Bs 60, cuando el recorrido llega a la Pérez Velasco; Bs 70 a las villas y entre 90 a 100 a la zona Sur. Mientras que la tarifa de otros móviles que no tienen el permiso de Sabsa, su tarifa es de Bs 30 al centro de la ciudad de La Paz; 50 a alguna villa y hasta 75 a la zona Sur.

“Nosotros a las personas que nos solicitan nuestros servicio, por ejemplo a la Pérez Velasco, cobramos entre Bs 25 hasta 30 si fuera muy tarde”, indica un conductor libre, aspecto que evidencia una diferencia menos del 240% ante el cobro de los conductores de los cinco sindicatos admitidos.

El cobro irregular de pasajes continúa siendo la principal observación de este tipo de servicio de transporte.

“Es un robo, no sé quién es el que permite esa ridiculez, porque un aeropuerto debería tener otros servicios de transporte y no móviles tan caros, que de paso no compensa con el servicio que hacen, en algunos casos ni conocen la ciudad para llegar hasta la vivienda”, lamentó un pasajero.