36.5 t. de oro salen cada año de Inquisivi sin control estatal

El senador opositor Yerko Nuñez, en visita efectuada el pasado 5 de mayo al yacimiento aurífero de Arcopongo, en la provincia Inquisivi, del Departamento de La Paz, constató que al menos 36.5 toneladas de oro son extraídas anualmente de la zona sin control del Estado.

Añadió que en su recorrido pudo evidenciar la existencia de 200 camiones y más de 20 palas mecánicas que dragan los bordes del río Chaqueti, en busca del metal precioso.

Se maneja el yacimiento como un “Estado Mayor”, con presencia de “guardias civiles” y ausencia del Estado, manifestó. Habría cinco cooperativas que explotan los ricos yacimientos auríferos de Arcopongo, reiteró.

En este lugar, en mayo de 2014, se produjo un enfrentamiento entre mineros y avasalladores, con el trágico saldo de tres muertos y varios heridos. Ante lo sucedido, el Gobierno prometió ejercer un estricto control en la región, el que se desvaneció en el camino.

Arcopongo está ubicado a 127 km al oeste de la ciudad de La Paz, en la provincia Inquisivi, a la altura de 2.677 metros. Hasta ahí llegó el senador beniano, el sábado 5 de mayo, para encontrar los motivos del por qué el Ministerio de Minería desde hace siete meses no responde a un cuestionario que se le presentó en la Cámara Alta, sobre la actividad minera en aquél distrito, enclavado entre montañas.

MINISTRO

Sin embargo el ministro César Navarro, sostuvo esta semana que hay un “control relativo” del Estado, a consecuencia del enfrentamiento que se produjo hace tiempo y que derivó en una división, entre indígenas y cooperativistas que fueron autorizados legalmente a operar.

Empero, Núñez cree que se está ocultando información al pueblo boliviano desde 2012 y no se quiere reconocer que hay cinco cooperativas que utilizan 200 volquetas y más de 40 palas en la explotación de oro, en la zona de Arcopongo, a poca distancia de la sede del Gobierno.

CADENAS

El río Chaqueti es el que trae y acumula la riqueza aurífera en la ribera. Al llegar a sus orillas, el senador de oposición se encontró con una tranca, una cadena que cruzaba de un lado a otro, pero imposible de pasar. Un anciano lo esperaba a un costado de la tranca para preguntarle quién era. “Soy el senador Yerko Núñez”, le respondió.

“No puede pasar”, le dijo el anciano, ataviado de una parca y gorro que le tapaba las orejas para protegerse del frío. “Por qué no puedo pasar. Si es propiedad privada no puedo pasar, pero si es pública sí puedo fiscalizar”, explicó sin éxito el legislador, mientras un comunario gritaba: “forme la guardia”.

Al rato, varios hombres subieron hasta la tranca donde procedieron a filmar la movilidad del parlamentario, quien, pese a exhibir su credencial de Senador, no pudo ingresar y, al contrario, fue objeto de registros fotográficos y filmaciones.

No recibió explicación alguna y sólo le dijeron que ingresaban personas conocidas, siempre que sean autorizadas “por el Jefe de La Paz”.

MAQUINARIA

Al final, Núñez y sus acompañantes no ingresaron a la zona, pero tampoco retornaron con las manos vacías, sino con imágenes que muestran un gran movimiento de maquinaria pesada. Volquetas que recogen tierra en las orillas del río y llevan a enormes lavaderos de oro, mientras al frente palas mecánicas, valuada cada una en 400 mil dólares, devoran cerros y cargan la tierra aurífera.