La Armada planteó reforzar el control en las fronteras con Brasil y Perú, cuyo objetivo, además de luchar contra el comercio ilegal, es prevenir la explotación de recursos naturales, según fuentes oficiales.
La Armada cubre 3.075 kilómetros de línea de frontera, vale decir la mitad de toda la periferia del país, tanto en el lago Titicaca como el río Bermejo, en el sur, ascendiendo al norte, Pando, Beni y todo el río Itenez, en la parte de Santa Cruz, puerto Quijarro la Gaiba, Mandioré y otras poblaciones.