Bandas participarán de la “Promesa”

Más de 40 mil danzarines de las 60 fraternidades, acompañados de 7.000 músicos que conforman las diferentes bandas, reeditarán este sábado la “Promesa” al señor Jesús del Gran Poder, como un preámbulo a lo que será la fastuosa entrada folklórica que este año se realizará el sábado 26 de mayo.

El Gran Poder es una simbiosis pagano religioso que demanda la inversión y participación activa de los “fraternos” en varias actividades como los ensayos y lujosas recepciones sociales con la presentación de reconocidos grupos musicales del exterior.

De ahí que tiene sus vínculos con lo económico, más si se realiza una sumatoria de los gastos que erogan los denominados “fraternos” para cumplir con las exigencias impuestas como: disfraces, fletes de bandas de música, trajes.

Según el historiador Hugo Boero Rojo, la festividad del “señor Jesús del Gran Poder” o la Santísima Trinidad (un lienzo de la imagen de dios con tres rostros, representando su carácter trinitario: padre, hijo y espíritu santo) tiene su origen en la populosa zona de Ch’ijini el 1663, cuando se fundó el Convento de las Madres Concepcionistas en el Templo de la Calle Antonio Gallardo.

A lo largo de estos años, la entrada del Gran Poder ha sufrido cambios en cuanto a los disfraces (caporales, morenadas, tobas) así como la incorporación de nuevas expresiones folclóricas como el salay.

RECORRIDO

La avenida Baptista y la calle Alejo Calatayud serán los sitios donde se concentrarán los bailarines de las 65 fraternidades participantes.

El recorrido se iniciará en la plaza Garita de Lima y continuará por las avenidas Tumusla y Buenos Aires. Proseguirá por las calles Chorolque, Vicente Ochoa, Antonio Gallardo, Sebastián Segurola y Sagárnaga.

Los danzarines bajarán hacia el centro de la urbe paceña por la calle Pando para tomar las avenidas Ismael Montes y Mariscal Santa Cruz para acceder a la avenida Eliodoro Camacho y luego seguir por la avenida Simón Bolívar.

El palco oficial estará situado en la avenida Camacho, donde cada fraternidad hará gala de coreografías especiales en procura de ganar la simpatía de un jurado elegido para designar a la fraternidad vencedora de la entrada folklórica.