El presidente candidato del Estado Plurinacional, en su campaña electoral que dura doce años, en una reunión de la “Conamaq” oficialista en la localidad de Llallagua, la pasada semana sentenció: “Los indígenas estarán en el poder ‘toda la vida’, no son inquilinos de Palacio de gobierno, hemos llegado no como inquilinos, no de paso, hemos llegado para toda la vida…”.
Este pensamiento del presidente ya fue expresado en anteriores oportunidades, aunque ahora lo hace a un año y meses de las próximas elecciones generales -siempre y cuando éstas se efectúen-, pues a la luz del examen de lo que sucede con los otros gobernantes (quedan pocos) del populismo del socialismo del Siglo XXI, éstos se han entornillado en el poder político y con triquiñuelas, desconocimiento de sus normas, fraude electoral, etc., se aferran al poder y ni por los centenares (Venezuela) o decenas (Nicaragua) de muertos a balazos por la represión, ni por la presión y protesta internacional, dejan el poder.
Esta expresión del poder “para siempre”, resulta ciertamente un grave atentado al sistema de vida democrática, que entre sus principios tiene a la renovación cada cierto tiempo de las autoridades que ejercen el poder del Estado, mediante la consulta al pueblo depositario de la soberanía popular. Ya mediante una encuesta que realizó una empresa para un periódico colega que se edita en esta ciudad, el 65% de los encuestados manifestó que el presidente candidato no respetará los resultados electorales en ciernes, como lo hizo con los resultados del referéndum convocado por el mismo gobierno el 21 de febrero de 2016, para consultar al pueblo sobre la reforma a la Constitución Política del Estado y la Ley Electoral, en el articulado que prohíbe la reelección por más de dos gestiones, y que fue rechazada por la mayoría.
Esta declaración es una manifestación de voluntad política del presidente candidato y cabeza de las organizaciones que respaldan las políticas del actual gobierno, denominadas “movimientos sociales”, aunque este concepto engloba a toda organización social y de cualquier actividad económica y social, y no sólo a las que están en el gobierno actual, pues muchas organizaciones de las sociedad civil son críticas al régimen populista que hace doce años está en el ejercicio del poder. Además ese pensamiento presidencial importa una postura “racista”, pues pone a los indígenas por encima de los otros grupos sociales, es decir que éstos, por ser superiores racialmente, deben quedarse en el poder por “toda la vida”.
En estos tiempos que parecía serían de la plenitud de vida democrática en el mundo, luego de la caída estrepitosa del sistema socialista comunista encabezada por la ex URSS, y quedaban en el mundo un par de países (Cuba y Corea del Norte) que mantenían la dictadura del proletariado (aunque en verdad sean una suerte de regímenes monárquicos), la primavera árabe, etc., se dan casos de regímenes de gobierno “para toda la vida”, como en Siria, Rusia y otros en Latinoamérica y África, que siguen esa perversa corriente antidemocrática y antihistórica, debido al “no me importismo” y abandono de los principios democráticos de vida colectiva, de los principales países del mundo, en especial de Europa y Norteamérica, pese a las Cartas, acuerdos y convenios democráticos de organismos supranacionales, pues parece que los buenos negocios son más importantes que la libertad y vida de millones de individuos en nuestro planeta tierra.
Ojalá se den nuevamente los vientos democráticos de las últimas décadas del pasado siglo y los primeros del actual, para que la humanidad se desarrolle con ese clima de libertades y oportunidades, sin interferencias de dictaduras y tiranías que deberían haber sido superadas históricamente.
El autor es abogado y politólogo.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |