Expertos escépticos ante ilógica teoría de canica

Una de las principales exigencias de las investigaciones en un hecho criminal, es que tanto la administración, como el procedimiento en el lugar de los hechos deba regirse a métodos propios o internacionales, entre ellas, realizar la denominada prueba de campo o prueba científica antes de dar por sentado un hecho, como la muerte del universitario Jonathan Quispe Vila, de 20 años de edad.

Desde los antecedentes, como la muerte de una persona en Chawhuaya ocurrido el 2011 al 2012 donde también se responsabilizó el uso de una canica, como responsable de la muerte por las autoridades de Gobierno, es que se realizaron diferentes prácticas experimentales, las cuales establecen que la carga explosiva de un petardo, cualquiera sea esta es de muy baja precisión y para que gene la muerte de una persona, el tirador debe estar a cinco metros de distancia de su víctima, explicó uno de los peritos de parte, consultado por EL DIARIO, quien solicitó reserva de su identidad, ante la politización del tema por parte de las autoridades de Gobierno.

SOLAMENTE ESCOPETAS

“Una canica solo puede matar si la misma es disparada desde una escopeta, la cual solo es utilizada por efectivos policiales, al tener esta arma reglamentaria mayor poder de expulsar este tipo de elementos al interior de sus cartuchos donde antes se disparaban perdigones de goma. Mientras que el uso de un petardo para estos fines, primero se debe descartar porque este tipo de elemento tiene una menor carga explosiva, la misma es mínima, no es igual que una escopeta o un lanza gas”, explicó.

CORTA DISTANCIA

Para el especialista, el tirador debería estar a cinco metros de la víctima, si hubiera utilizado petardo para disparar una canica, pero de acuerdo con la última testigo, una de las universitarias quien pretendió reanimarlo a Quispe, dio a conocer que él cayo directamente al suelo y sangró profusamente, perdiendo sus signos vitales de forma inmediata, ante la vista de sus compañeros, quienes no vieron a nadie a esa distancia tan corta hacer uso de un petardo a quema ropa.

Pero si la segunda hipótesis es que se hizo uso de una escopeta (arma reglamentaria) que lanza perdigones de goma, el tirador, de acuerdo al perito pudo estar a 15 o más metros para lograr su cometido, porque este tipo de armas tiene una mayor potencia en la carga explosiva para ocasionar que este tipo de perdigones o canicas sean letales.

PRUEBA DE CAMPO

Otra de las observaciones realizadas por el perito, es cuando la autoridad de Gobierno, Carlos Romero, da cuenta que el disparo fue realizado de arriba con dirección abajo, “el hecho resulta ser menos objetivo”, porque la víctima puede ser que haya estado agazapada y el tirador que estaba lanzando el supuesto petardo, ocasiona que la propulsión de la canica impacte en el cuerpo de arriba hacia abajo, “por lo tanto antes de dar por concluido el caso, es urgente que se deba hacer una pericia del caso, una prueba de campo una reconstrucción del hecho que permita establecer científicamente lo que se argumenta”, indicó.

En la presente semana diferentes peritos realizarán el análisis de los hechos, tomando en cuenta que se trata de más de tres muertes donde el argumento de supuesto uso de canica disparada por un petardo, ocasiona la muerte de personas, se torna poco creíble.

PERITOS NEUTRALES

Si bien estaba presente en el examen de médico forense una abogada por parte de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), se desconoce qué tipo de perito en balística, pero que no fuera de la Policía, porque no pueden ser juez y parte los que participaron de dicho procedimiento pericial.

Asimismo se espera que en el procedimiento y la administración del lugar de los hechos, se presente por parte de los investigadores, no solo las fotografías, sino el protocolo forense, sino la planimetría del caso y el informe de un perito en balística, que no sea de la instancia policial, para establecer cuan real es la hipótesis planteada por las autoridades de Gobierno, concluyó el entrevistado.